La confianza depositada en el joven Jesús Gallardo este torneo no basta para cubrir el grave déficit de canteranos en una institución que solía presumir siempre bombear sangre nueva. Tras un éxodo de irregularidad, Pablo Barrera volvió a C.U. aunque sigue sin encontrarse consigo mismo y Javier Cortés incluso retrasó su posición de extremo ofensivo a medio de recuperación.
¿Se murió la cantera de Pumas?
Pese a que Pumas hoy juega con cinco canteranos, varios talentos que prometían en sus inicios no lograron consolidarse con el Club Universidad.
Sin mencionar los casi inmemoriales tiempos en que Pumas solía nutrir a la selección mexicana, muy lejanos también están los años en que la cantera universitaria abastecía con talento titular a otras escuadras fuertes del balompié mexicano: esos años de Braulio Luna exportado al América, de Jesús Olalde o Antonio Sancho a Tigres, de Claudio Suárez a Chivas o de Gerardo Torrado o Israel Castro a Cruz Azul.
En el pasado, surgir de la cantera felina significaba contar con el fútbol suficiente para ser figura en cualquier otra escuadra de primera división.
Hoy día, en cambio, son varias las promesas universitarias que salieron de Pumas y además no lograron consolidar sus carreras en clubes de Liga MX con aspiraciones algo más discretas. En la sub-20 de México que logró un histórico tercer lugar en el mundial de Colombia 2011 jugaban Diego de Buen, David Cabrera, Emilio Orrantia y David Izazola: De Buen ya ha jugado en cinco equipos distintos, Cabrera intercala banquillo con titularidad en Morelia, Orrantia lo mismo en el Puebla e Izazola incluso ya se retiró denunciando los pobres manejos de Pumas.
Eduardo Herrera, por su parte, ha perdido la titularidad en el ataque felino en favor de un doble nueve conformado por Matías Britos y Fidel Martínez. Propiamente, ‘Lalo’ Herrera sólo ha disfrutado de confianza cuando ha sido dirigido por Guillermo Vázquez, y nada más.
¿Está pues al borde del coma la cantera puma? En su defensa puede decirse que el Club Universidad padece tanto como el resto de los clubes mexicanos la liberalización en los cupos de jugadores foráneos. No obstante, para una escuadra antaño caracterizada por formar a la juventud, el irregular presente de los hechos en C.U. habla de un equipo que perdió su identidad.