Tigres es un equipo con rodada y experiencia que no necesita una multitud de llegadas o de largos periodos de posesión del balón para ganar, le basta con chispazos de talento. Con un par de chances para matar, para sentenciar partidos y series. Y así le ganó 2-0 a Santos en el juego de ida de los cuartos de final del Clausura 2018.
¡Zarpazos de muerte! Tigres se lleva una ventaja ante Santos que parece definitiva
Con tantos de Hugo Ayala y André Gignac, los felinos se impusieron con experiencia y fútbol a los Guerreros en el Universitario.
Se hablaba de un duelo de goleadores. De esos hombres que firman el espectáculo y atraen las multitudes. Que pueden ser matones o artistas, Gignac o Djaniny. Finalmente resultó así, pero también fue un encuentro de músculo y estrategia.
Más cercano a un fútbol rocoso y atorado en el medio campo, que desplegado por las bandas y en las porterías.
Porque a pesar de que ‘Tuca’ optó por colocar a Jurgen Damm y Javier Aquino por los laterales. Y a Enner Valencia, Eduardo Vargas y André Gignac generando fútbol del medio campo para adelante, Siboldi cerró espacios con Villafaña, Izquierdoz e Isijara y el partido se trabó.
El resultado fue un duelo peleado y trompicado a la mitad del campo con los atacantes buscando espacios y apenas encontrándolos.
Pero sí fue Djaniny el hombre más peligroso de los visitantes. Se desmarcó, buscó los huecos y cuando tuvo el balón hizo daño. El fútbol que dañó al local pasó todo por sus botines.
Pero para sorpresa de todos, no fue un estilista del gol el que encontró el arco. A los 21 minutos, tras un tiro de esquina Hugo Ayala se levantó en el área y le ganó el balón de cabeza a dos defensas para el 1-0 de los felinos.
Luego tan reñido y justo de ideas estuvo el duelo que camino más cerca de peleas y puñetazos que de otro gol.
Solo cuando Damm o Djaniny tomaron el balón algo de fútbol se pudo ver en el Universitario, pero ambos siempre decidieron mal la última jugada. La que define.
Así hasta la segunda mitad y solo ahí, Gignac dio alguna señal de su talento en una pared con Enner Valencia que dejó correr de más y envió a la tribuna.
Entonces la polémica, Jesús Angulo empujó a Damm en el área de Santos, lo derribó pero el árbitro no cobró penal ante la exagerada caída del jugador de Tigres.
El duelo se revolucionó con el ingreso de Jonathan Rodríguez y Djaniny por fin tuvo un socio con el balón. Santos vivió sus mejores momentos, Gerardo Alcoba desperdició un franco remate de cabeza que dio en las manos a Nahuel.
Más tarde, Djaniny intentó una de fantasía que nunca quebró hacía el arco de Tigres.
Si, Siboldi cambió el duelo con el ingreso de Rodríguez, 'Tuca' hizo lo propio ajustando la defensa con el ingreso de Israel Jiménez y la salida de Damm. Con la vuelca de tuerca, el medio campo tuvo más libertad y el ataque más oportunidades.
Y a los 76', Gignac tomó el balón, disparó y el balón le pegó en el pecho a Izquierdoz luego fue a su mano. El árbitro marcó penal y Gignac un instante más tarde lo cobró estupendamente pegado al poste derecho del arco de Jonathan Orozco.
El duelo se acabó ahí, pero Tigres todavía intentó matar la serie. Jonathan Orozco lo evitó con algún buen lance, pero no más.
Tigres dio dos zarpazos y dejó herido de muerte a Santos.