El Benfica nunca lució tan débil y vulnerable en defensa como en su triunfo 3-2 de visita en Río Ave, presionado por la victoria 4-0 del Porto más temprano.
Benfica, cerca del título en Portugal con triunfo manchado por el arbitraje
El juez Hugo Miguel decidió no revisar personalmente en el monitor un penal en contra del Benfica que acabó en el 2-0 de Joao Félix.
Pese al tempranero 1-0 de Rafa Silva a los tres minutos de juego, el Río Ave vió cómo el referí Hugo Miguel le invalidó justamente el empate anotado por Tarantini Monteiro por fuera de juego. Sin embargo, el equipo del ex Benfica y Real Madrid Fabio Coentrao no bajó los brazos y la polémica no acabaría.
Tanto así que al filo del minuto 45 el jugador benfiquista Florentino le hizo un penal a Gabrielzinho. Hugo Miguel continuó la jugada, que resultó en un contragolpe cuyo pase final estuvo destinado a un Joao Félix en clarísimo offside.
El suizo Haris Seferovic (que sí estaba habilitado) remató, pero Félix recogió el rechace para el 2-0.
Entonces inició la comunicación con la sala de videoarbitraje, con el juez central desistiendo de revisar el monitor en persona. El gol subió al marcador con los futbolistas verdiblancos fúricos e incrédulos.
Ya en la segunda mitad Tarantini hizo el descuento, definiendo con poder ante el guardameta Odisseas Vlachodimos. Pero a los 56 minutos Luis Miguel 'Pizzi' puso el 3-1 para poner tierra de por medio.
A partir de ahí, el cuadro encarnado de Lisboa se atrincheró en su área.
Con poco en el reloj, un heroico Río Ave hizo el segundo gol que introdujo el nerviosismo en los cuerpos de los jugadores de Bruno Lage. No obstante, llegó el silbatazo final que pone al Benfica a un triunfo de ser campeón portugués, con muchísima polémica.