Futbol

    Marco Antonio Rodríguez se unió a los arbitrajes mexicanos controversiales en Mundiales con la mordida de Luis Suárez

    Hace 6 años Luis Suárez mordió a Chiellini, Marco A. Rodríguez se sumó a las polémicas de Codesal y Brizio.


    Por:
    TUDN


    Video La mordida de Luis Suárez y el despiste de Marco A. Rodríguez
    A seis años de la controversia arbitral que colocó de nuevo al arbitraje mexicano bajo la lupa.
    1:32 mins

    El 24 de junio de 2014, Luis Suárez sorprendió a todo el mundo con una mordida a Giorgio Chiellini durante el partido entre Italia y Uruguay en la Copa del Mundo en Brasil, el cual fue pitado por el mexicano Marco Antonio Rodríguez y quien no vio la acción para sumarse a las controversias arbitrales mexicanas en Mundiales.

    La jugada se dio al minuto 78 dentro del área italiana, cuando Edinson Cavani intentaba enviar un centro a Luis Suárez, pero éste, sin motivo aparente, mordió el hombro izquierdo del defensor de la Azzurra.

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    Marco Antonio Rodríguez no vio la acción, ni sus asistentes. En ese momento el uruguayo no fue sancionado, pero posteriormente fue sancionado por nueve partidos e inhabilitado cuatro meses de cualquier actividad deportiva.


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    El uruguayo maravilló con esta definió a tres dedos y al ángulo en el entrenamiento del Barça.
    0:12 mins

    No fue la primera vez que el arbitraje mexicano en un Mundial se vio envuelto en polémica en lo que parecía una decisión errónea. La más recordada fue la de Edgardo Codesal en la Final de Italia 1990.

    Codesal marcó un penal tras una supuesta falta de Roberto Sensini sobre Rudi Völler que cobró de penal Andreas Brehme y que el astro argentino Diego Maradona reclamó de forma airada hasta ser amonestado, con Alemania y Argentina como protagonistas; esa jugada le dio el título al cuadro europeo.


    Video La amarga anécdota de Codesal, árbitro mexicano, sobre Maradona
    El exárbitro mexicano contó que al argentino lo pudo expulsar antes de la Final del Mundial 1990 por insultos.
    1:06 mins

    Arturo Brizio también estuvo en el ojo del huracán cuando en la Copa del Mundo Francia 1998 expulsó en fase de grupos a Zinedine Zidane cuando Francia derrotaba 2-0 a Arabia Saudita. El nazareno mexicano aseguró que por esa decisión no pitó la Final.


    Así, si bien el arbitraje mexicano volvió a verse envuelto en controversia, Luis Suárez demostró que su actitud era digna de un psicólogo, al cual acudió, y que no fue la primera vez que ocurrió, pues lo hizo cuando militaba en el Ajax y mordió a Otman Bakkal, del PSV; y posteriormente, como jugador del Liverpool, a Branislav Ivanovic, del Chelsea, en 2013.

    Ellos son los jugadores que algunos aman y otros odian, ídolos en un equipo, repudiados en otro, o simplemente no le caen a los aficionados por su actitud burlona y retadora.
    Nicolás Castillo. Querido por la afición azulcrema, odiado por la afición de Pumas tras haber regresado al futbol mexicano con el rival de toda la vida: el América.
    Oribe Peralta. Amado por muchos mexicanos gracias a su gran actuación los Juegos Olímpicos de Londres 2012, pero odiado por toda la afición azulcrema luego de irse a las filas del archienemigo las Chivas de Guadalajara.
    Nahuel Guzmán. Ídolo en Tigres, odiado por la afición rayada y por muchos aficionados del futbol mexicano gracias a sus declaraciones y actitud burlona dentro del terreno de juego.
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    André-Pierre Gignac. Leyenda de Tigres, odiado por Rayados gracias a todos los goles y malos momentos que los ha hecho vivir.
    Lionel Messi. Es amado por argentinos, catalanes y personas alrededor de todo el mundo gracias a su gran nivel futbolístico; odiado por toda la afición madridista y algunos argentinos que lo llaman pecho frío.
    Cristiano Ronaldo. Amado por todo su país, madridistas, aficionados del Manchester United y por todo el mundo gracias a sus actos de gentileza y gran nivel futbolístico. Odiado por gran parte de la afición futbolera debido a su personalidad engreída.
    Luis Suárez. Es amado e idolatrado en la selección uruguaya; es odiado por todo el mundo debido a sus polémicos mordiscos y por la mano que detuvo el gol del pase de Ghana a la semifinal del Mundial de Sudáfrica 2010.
    Gerard Piqué. Ídolo en Barcelona, odiado por los españoles gracias a su discurso en favor de la independencia de Catalunya.
    Neymar. El brasileño polariza, algunos lo idolatran mientras otros lo detestan debido a su comportamiento dentro y fuera del campo.
    Arjen Robben. Amado por los holandeses y aficionados del Bayern Múnich, pero odiado por toda la afición mexicana gracias a su penal fingido frente al Tri en el Mundial de 2014 y también por los aficionados del Borussia Dortmund
    Antoine Griezmann. Ídolo en la selección francesa, ahora repudiado por gran parte de la afición colchonera gracias a cómo se dio su traspaso al Barcelona.
    Gonzalo Higuaín. Estimado por gran parte de la afición madridista por los títulos que consiguieron juntos; odiado por toda la afición del Napoli, tras irse a la Juventus, y por todos los argentinos gracias a sus grandes fallos en partidos y momentos importantes.
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    Mario Balotelli. Querido por algunos italianos y por los aficionados del Manchester City pero odiado por la afición del Inter de Milán por cómo le faltó al respeto a la playera al quitársela y arrojarla a suelo.
    Fernando Torres. Amado por la afición colchonera. Repudiado por la afición del Liverpool tras irse al Chelsea que le ofreció un mejor salario.
    Diego Costa. Es cobijado por la afición colchonera, pero odiado por muchos gracias a su agresividad y prepotencia.

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    Imagen Matthias Hangst/Getty Images
    Ellos son los jugadores que algunos aman y otros odian, ídolos en un equipo, repudiados en otro, o simplemente no le caen a los aficionados por su actitud burlona y retadora.
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