Antes de Lyon, los Estados Unidos y Francia se habían enfrentado en tres ocasiones en toda su historia, todos amistosos y todos a favor de los galos. En esta ocasión, con realidades muy diferentes, se volvían a ver las caras; unos para calentar motores a días de su debut mundialista y los otros para dar forma a su proyecto.
Mbappé rescató el empate para Francia ante un Team USA sin muchas ideas
El encuentro amistoso ante los Estados Unidos dejó un sabor de boca agridulce para los galos, quienes debutarán en Rusia 2018 ante Australia. Por su parte, un joven Team USA no mostró grandes cambios.
Griezmann y Mbappé fueron los jugadores más activos en toda la cancha. El primer tiempo le perteneció a Les Bleus, explotaron las bandas con la velocidad y habilidad de Matuidi, Pogba y el propio delantero del PSG. Fue el 7 de Francia quien avisó primero con un remate cruzado.
Como se esperaba, Francia se adueñó del esférico y dictó los tiempos y los espacios. La calidad del mediocampo galo fue demasiado para un equipo estadounidense con una media de 23 años y 102 días. Si las bandas se habían convertido en una vía para asediar el arco rival, el centro del campo tampoco careció de oportunidades.
Mbappé explotó los pequeños espacios y la confusión de la última línea del Team USA para sacar un remate que se quedó a centímetros del travesaño de Steffen.
Mbappé y Griezmann se turnaron para atacar a un equipo visitante que no pudo encontrarse durante todo el partido. El conjunto de las barras y las estrellas mostró una cara muy distinta a la mostrada contra Bolivia o incluso ante Irlanda, sin ideas y con un parada demasiado defensivo.
Sin embargo, el fútbol da sorpresas y tras un erro en la zaga de los locales, el Team USA se adelantó en la pizarra. Green aprovechó el pésimo despeje en el área para disparar al poste cercano de Lloris y dar la sorpresa en Lyon a segundos de la conclusión de los primeros 45 minutos.
En el complemento, Francia quitó el pie del acelerador y el encuentro careció de llegadas en ambos lados de la cancha. El tremendo choque de cabezas entre Giroud y Miazga fue lo más relevante en los primeros minutos del segundo tiempo.
Les Bleus se fueron al frente a ratos, queriendo empatar el encuentro pero no de una forma obsesiva, pues el Mundial está a la vuelta de la esquina y los riesgos son muchos.
A 10 minutos del final, un desborde por la banda derecha encontró la diestra de Mbappé entre el mar de piernas estadounidenses para marcar el empate de un partido que prometía mucho más tras los primeros 45.
Les Bleus tuvieron un par de oportunidades más en el tiempo de compensación, pero el marcador no se movió. Francia no tuvo un amistoso ideal a días de su debut en Rusia 2018 ante Australia. Los Estados Unidos siguen sin encontrar a un equipo base para los años venideros.