Andrés es parte de los cuatro futbolistas mexicanos que disputaron cinco Copas del Mundo, junto con Antonio ‘La Tota’ Carbajal, Rafael Márquez, y el portero Francisco Guillermo Ochoa, un logro digno de presumirse y siempre ponderar porque gracias a su entrega y profesionalismo alcanzó esa distinción.
Guardado Hernández con el paso de los años y las experiencias acumuladas pasó de ser el niño del Tricolor de La Volpe en la Copa del Mundo de Alemania 2006 a convertirse en uno de los principales referentes del equipo mexicano hasta la justa mundialista de Qatar 2022, donde puso fin a su dilatada carrera como seleccionado.
Se marcha tras sumar 183 partidos que lo colocan como el futbolista mexicano que más veces portó y defendió la playera nacional, anotó 26 goles y dio la misma cantidad de asistencias, estadísticas que quedarán ahí para quienes gusten de ellas, pero que nunca se podrán comparar con su profesionalismo.
Fue convocado para esta fecha FIFA por el técnico Javier Aguirre para rendirle un homenaje y que tenga su partido de despedida del Tricolor, pero quizá sólo se trate de un hasta luego de Andrés con la selección, porque si algo sabe es que en un corto plazo su regreso se podría dar, pero ya desde otra posición.
El Principito se marcha por ahora del equipo mexicano, pero lo que nunca se irá es la imagen que deja y que su entrega deba servir de inspiración para las nuevas generaciones; sí, esas que él mismo reveló que por momentos le hicieron sentir que les pesaba ser convocados por los largos periodos de concentración.
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Hasta pronto, Andrés; que tu regreso al equipo mexicano sea por la misma puerta grande que ahora te marchas y que cuando llegue ese momento lo hagas como entrenador, pero con todas las tablas para poder cumplir los anhelos que quizá como jugador y de manera grupal no fue posible conseguirlos, como es disputar más allá de un quinto partido.
