¿Por qué sí y por qué no es Osorio el técnico adecuado para Tri?

Es casi un hecho el arribo de Juan Carlos Osorio a la Selección Mexicana. Las voces a favor y en contra se escuchan por todos lados, aquí te enseñamos algunas de ellas.

¿POR QUÉ SÍ? – Los que le conocen coinciden en un aspecto, nada menor, sobre Juan Carlos Osorio: Es un hombre estudioso del fútbol y gusta de mantenerse actualizado.

Incluso antes de terminar su carrera como futbolista ya estaba titulado en Ciencias de Ejercicio Físico y Rendimiento Humano por la Universidad de Connecticut y ha seguido preparándose desde entonces.

Por ejemplo se especializó en Ciencias Superiores del Fútbol en la Universidad de Liverpool en el año 2000. No hay duda de que el hombre sabe académicamente de fútbol.

Pero no sólo se trata de conocer el fútbol desde el aspecto teórico, sino también desde el práctico. Osorio ha pasado por todos los puestos en la dirección técnica de un equipo.

Ha sido asistente técnico (Staten Islan Vipers de la NPSL o el Manchester City) así como preparador físico (Manchester City). Y por supuesto director técnico en la MLS, en México, en Colombia y en Brasil.

Todo el que lo ha visto trabajar habla de su innegable visión táctica. De su trabajo diario sobre ese punto y su desglose de los partidos parte por parte.

Conoce el medio mexicano, aunque esta aseveración también puede jugar en su contra. Porque únicamente dirigió 11 juegos en el 2012 antes de irse de Puebla, de ellos únicamente ganó dos.

Siendo colombiano sabe perfectamente de la idiosincrasia latina del fútbol y sus siempre complejos resquicios que aunque en cada nación latinoamericana es distinta, tiene muchos matices similares.

En la FMF apostaron por él desde el principio y todo indica que lo buscaron con denuedo así que su estima debe estar por todo lo alto ante la insistencia de los directivos mexicanos.

Sabe lo que es ser campeón tanto con un equipo de los llamados grandes, como el Millonarios de su país, como con un equipo algo más modesto como el Once Caldas.

Su ambición de dirigir a un equipo con aspiraciones mundialistas puede ser uno de sus principales puntos a favor.

Ha sido capaz, por cumplir el sueño mundialista, de dejar a un club como el Sao Paulo, uno de los grandes del fútbol brasileño.

¿POR QUÉ NO?- Cuando el nombre de Juan Carlos Osorio se empezó a manejar como posible técnico del Tri, no sólo muchos aficionados se preguntaron quién era sino incluso jugadores desconocían de quien se trataba.

Ello puede hacer que dentro del cuadro mexicano se le vea con cierto recelo y hasta con dudas en su trabajo.

Regresemos al punto de los 11 juegos con el Puebla. Con algo más de 10 encuentros, nadie puede ser capaz de decir que conoce el medio al que se va a enfrentar.

Algo de camino seguro lleva adelantado, pero eso es poca garantía en un fútbol tan complejo.

De la misma manera que se habla de su aplicación táctica y su estudio de juego. Se le cuestiona su habilidad de decisión, sobre todo en los cambios, a la hora de los partidos.

El hecho de dejar botado al Sao Paulo al que recién había llegado esta campaña, tampoco habla muy bien de él.

Su renuncia ha causado molestia y divisiones dentro de un conjunto que había apostado por su persona a largo plazo, tenía contrato hasta diciembre del 2016.

Además no es la primera vez que deja un proyecto a medias y se va. Ya lo había hecho en la MLS y por ello tiene una mala imagen general dentro de la liga estadounidense.

Su manejo de la situación entre la Selección Mexicana y Sao Paulo, ya con la oferta en la mano, no ha sido de lo mejor. Tardó demasiado en tomar una decisión y tuvo al pendiente de ella a demasiadas personas.

Negó sistemáticamente el ofrecimiento y cuando ya tenía todo decidido no fue claro y pidió tiempo para darla a conocer.

Su indecisión ante los medios de comunicación y su poca claridad, puede causarle muchos problemas en México con una prensa acostumbrada a ser incisiva y a tener un foco de atención permanente en el director técnico de la Selección Mexicana.

De cualquier manera, si finalmente se confirma –como todo parece indicar- su llegada a la dirección técnica del Tri, deberá equilibrar sus puntos positivos y negativos, y hacerlos trabajar a favor de su nuevo equipo.