La felicidad no es al 100 por ciento. La selección mexicana derrotó a su similar de Venezuela por marcador de 3-1, pero el triunfo resultó amargo, sin sabor y hasta preocupante para el ‘Tata’ Martino por una nueva lesión.
¡Tres de tres! Pese ausencias y lesiones, el Tri le pegó a Venezuela
El combinado dirigido por ‘Tata’ Martino remontó a la Vinotinto gracias a los goles de sus ‘alas’ Roberto Alvarado y Rodolfo Pizarro; también Andrés Guardado marcó.
Más allá de la buena reacción que tuvieron sus dirigidos luego de comenzar perdiendo con el golazo de Jhon Murillo, el Tri se fue con la muy posible baja de Edson Álvarez de la Copa Oro después de que se resintió de la rodilla derecha.
Esa misma lesión por la que el contención se perdió la Liguilla con el América hoy lo hizo salir muy temprano en el partido para dejar su lugar a Héctor Moreno y sobre todo encender las alarmas de cara al torneo de la Concacaf para el que México ya ha sufrido las bajas de Lozano y Fabián, mientras que Iván Rodríguez seguirá el mismo camino.
México era amo y señor del partido y de la pelota. Tenía profundidad y ya había logrado inquietar a Fariñez, pero al 18’ llegó un tiro de Murillo que sorprendió a Jonathan Orozco para abrir el marcador con un golazo.
El Tri no bajó los brazos y mantuvo la misma idea, esa que poco a poco le da resultados a Martino y que hoy parece tener mucha claridad para los jugadores mexicanos.
Fue entonces cuando pasada la media hora de juego, la pelota quedó en el área grande y ahí apareció ‘Piojo’ Alvarado para sacar un zurdazo que se metió casi en el ángulo de la portería de la Vinotinto.
Venezuela estuvo cerca de retomar la ventaja con un cabezazo que se estrelló en el poste, pero México se fue al descanso siendo mejor.
Llegó el complemento y llegó la ‘avalancha’ Tricolor que terminó por arrasar con una Vinotinto incapaz y que lejos se quedó de aquella demostración ante Argentina en la pasada fecha FIFA.
Tras un buen contragolpe, Jesús Gallardo llegó a línea de fondo y metió un centro muy calculado para la aparición de Rodolfo Pizarro, quien simplemente le puso el pie al balón para mandarlo al fondo con el 2-1 que sería momentáneo.
A partir de ese gol, Martino movió a sus piezas, le dio ingreso a elementos como Antuna, Guardado, Alexis Vega e incluso puso a Orbelín Pineda en lugar de Pizarro como extremo por izquierda.
Ya entrando en la recta final del partido, Guardado puso el 3-1 definitivo con un zurdazo raso y colocado que rompió a la defensa venezolana y dejó parado a Fariñez para el resultado definitivo que da mucha tranquilidad para la Copa Oro pese a las lesiones que afectan al Tri.