5 motivos por los cuales el Galaxy de Chicharito volverá a los Playoffs

LA Galaxy es el conjunto más ganador en la historia de la Major League Soccer al haber conquistado 5 MLS Cups. Pero en los últimos años a pesar del glamur que generan y las estrellas que visten su pesada camiseta, han navegado en la mediocridad.

Es por ello por lo que les urge volver a Playoffs, y estás son las 5 razones por las cuales esta vez sí lograran presentarse en la fiesta grande de la MLS:

1. CHICHARITO ENRACHADO VA POR RÉCORD PERSONAL

Contando solo goles en liga local en una sola temporada, Javier Hernández ya igualo su mejor marca personal. El goleador mexicano alcanzó los 17 goles, mismos que logró la temporada pasada también en la MLS, y previamente con el Bayer Leverkusen en la Bundesliga 2015-16.

CH14 está enrachado, en los últimos dos meses disputó 10 partidos de liga, y consiguió 10 goles (promedio de 1 por partido). En ese lapso, sus anotaciones contribuyeron directamente a 14 puntos. Y eso que fallo un par de penaltis – los cuales en realidad no le costaron derrotas al conjunto angelino.

Chicharito sigue siendo un depredador del área, y en los dos partidos restantes de temporada regular seguramente saldrá con el arco rival entre ceja y ceja.

2. RIQUI PUIG REVITALIZÓ EL MEDIOCAMPO GALÁCTICO

El canterano del Barcelona rápidamente ha demostrado su tremenda clase y se volvió pieza fundamental en el mediocampo del Galaxy. Desde que Puig debuto con la camiseta angelina a mediados de agosto, el equipo solo ha perdido uno de sus últimos 8 duelos.

Riqui ha aportado asistencias y en un par de goles in extremis para rescatar valiosos puntos en las hostiles canchas de Toronto y Nashville. En total, ha contribuido directamente en 7 goles (casi promedia 1 por duelo). Pero más allá de eso que se esperaba considerando su condición de estelar, es que ha demostrado enorme carácter y personalidad para ponerse en rol de héroe cuando las papas están ardiendo.

3. EL CELESTIAL APORTE DE LOS INFRAVALORADOS GASTÓN BRUGMAN Y MARTÍN CÁCERES

Históricamente, subestimar cualquier cosa que tenga que ver con el fútbol uruguayo, suele ser un grave error de los rivales. Los charrúas Gastón Brugman y Martín Cáceres llegaron en el mercado de verano, pero los reflectores se enfocaron en el fichaje de Puig y en el momento de Chicharito.

Pocas cosas tan peligrosas que dejar fuera de tú radar a jugadores forjados en la tierra de la garra charrúa. Prueba de ello es Brugman que llegó con una importante trayectoria en el fútbol italiano. Rápidamente se convirtió en el contención inamovible en el Galaxy, en donde provee balance. Y a eso hay que sumarle que, en últimas fechas, ya hasta marca golazos.

Cáceres, que es un veterano de mil batallas con la poderosa selección uruguaya, igualmente se hizo de un lugar entre los titulares de la zaga angelina. Apenas tiene unos cuantos partidos en la MLS, pero ya se percibe que el nivel defensivo del Galaxy va en notable ascenso.

4. EL CALENDARIO LE FAVORECE

Galaxy hoy se encuentra entre los privilegiados puestos que otorgan boleto a Playoffs, y además, controlan su propio destino. Por si fuera poco, los rivales en turno en el cierre de temporada son bastante benévolos.

Primero reciben en casa a un rival directo que aspira a bajar al Galaxy, el caso del Real Salt Lake. Y luego cierran ante un Houston Dynamo sin chances de nada y que es penúltimo de la Conferencia Oeste. Sumémosle que Héctor Herrera está lesionado. Por si fuera poco, los que le podrían sacarle el boleto, tienen partidos más complicados y además se enfrentan entre ellos – el caso de Portland ante RSL.

5. NO SE PUEDE PERMITIR OTRO FRACASO

Si hay un equipo en la Major League Soccer al que se le puede exigir como grande, ese es el Galaxy. Por lo cual sería inadmisible y un fracasotote quedar fuera de la liguilla por tercera temporada consecutiva.

En los últimos 5 años, solo han clasificado una vez a la fiesta grande. En dos de esas ocasiones en que se quedaron fuera (incluyendo una en la era de Zlatan Ibrahimovic), increíblemente no pudieron vencer en casa a Houston y a Minnesota, respectivamente, en la última fecha cuando no dependían de ningún resultado ajeno, solo de ellos mismos.