El equipo sorpresa desde el principio hasta este momento en el 2016 en la MLS previo a que se jueguen las finales de conferencia, sigue siendo Colorado Rapids. Un equipo por el que nadie apostaba, un cuadro por el cual aún con su gran arranque la pregunta seguía siendo ‘¿Cuánto les va a durar, en qué jornada se empiezan a caer?’. De los cuatro equipos que aún quedan vivos, Colorado es de hecho el más constante, el que más puntos hizo y que peleo el súperliderato hasta el fin de la temporada regular, y de clasificarse a la gran final de la MLS Cup, la final sería en su estadio. Y aun así, es el menos favorito de los cuatro, pero el que más lo merece si hablamos de justicia deportiva.
A Colorado Rapids nadie lo tenía como favorito pero ya están en la antesala de la MLS Cup
El cuadro de las Montañas Rocosas fue el único capaz de remontar en el partido de vuelta en las semifinales de conferencia ante el poderoso Galaxy.
Desde la dirigencia que incluye a Claudio “Piojo” López, pasando por el cuerpo técnico que dirige Pablo Mastroeni, y por un plantel con un hambre tremenda, Rapids tiene claro el objetivo – confiar en su trabajo y largo proceso. Pasaron años en la mediocridad, limpiando el plantel, y la virtud de la paciencia hoy los tiene en la antesala de poder jugar por su segunda Copa MLS, esa que ganaron en 2010, cuando igualmente eran menospreciados.
Remontada en las alturas galácticas
Rapids es el único equipo de los cuatro equipos privilegiados que descansaron en la primera fase de Playoffs que no está eliminando, que cuando llegó su momento de salir al escenario en las semifinales de conferencia, lograron salir abantes. Algo que los glamurosos equipos de Nueva York y el superlíder Dallas no pudieron lograr. Se presumía que Colorado no tenía la capacidad de reacción, ya que su ofensiva no tiene el calibre de las otras, y sin embargo fue el único que pudo remontar en el partido de vuelta la desventaja que sufrieron en la ida.
Además, no se toparon con cualquiera. Enfrentaron al más grande de la MLS, al máximo ganador de Copas MLS, al todo poderoso LA Galaxy dirigido por Bruce Arena que cuenta con una gama de estrellas incluida la mejor versión de Giovani dos Santos que tuvo un temporadon. Limitaron al poderoso ataque galáctico a tan solo un gol en una serie de 180 minutos más tiempos extras, y en los penaltis evidentemente patearon con mucha más convicción para quedarse con el boleto a la final de conferencia donde enfrentaran a Seattle Sounders.
¿Figuras? ¿Para qué? Si con la muralla defensiva e imbatibilidad en casa basta y sobra
Colorado no tiene a un Sebastian Giovinco, no cuenta con un Ignacio Piatti ni con un Nicolás Lodeiro. Se podría argumentar, al ver su plantilla, que sus figuras son los seleccionados estadounidenses Tim Howard y Jermaine Jones – los mismos que cuando fueron fichados todos pensaban que habían elegido mal, dos tipos viejos, con carreras en declive – y que, si, callaron bocas pero ambos se incorporaron con la temporada ya iniciada, Jones luego se lesionó y se perdió el cierre de campaña, y ahora Howard ha quedado fuera por el resto de los Playoffs; y aun así el equipo funciono antes de ellos, con ellos, y lo hará igualmente sin ellos.
El conjunto es la base de un sistema equilibrado que prioriza lo defensivo, que vaya que lo hacen bien. Fueron por mucho la mejor defensa con apenas 32 goles recibidos, promediando menos de uno permitido por encuentro (la segunda mejor defensa recibió 39). Su ataque no anotara goles por doquier, pero anota los necesarios, los Gashi, Badji, Doyle, Pappa, Hairston, Powers aparecen cuando se les requiere ya que después de todo saben que atrás el bloque defensivo con los jóvenes y desconocidos Axel Sjoberg y Jared Watts harán el trabajo para mantenerlos con vida en el encuentro. Y para rematar, hicieron de su casa su mejor aliado, una fortaleza imbatible, hicieron valer la altura y la localia como nadie por lo cual son el único invicto jugando como local en la MLS.