De explosivo a inofensivo: La dinastía de FC Dallas corre peligro en la MLS tras su reciente bajón

“No podemos perder la cabeza”.

Ese fue el mensaje principal del director técnico de FC Dallas Óscar Pareja tras la derrota de su equipo por 2-0 a manos de Sporting Kansas City el sábado pasado.

La plegaria del estratega colombiano no llega solamente como reacción al resultado en Kansas City. Más bien se trata de una respuesta al preocupante nivel que su equipo ha mostrado recientemente: FC Dallas no ha ganado sus últimos cuatro partidos, tres de ellos terminando en derrotas. En ese tiempo, el club texano ha recibido nueve goles y solamente ha anotado uno.

Es una situación desconocida para el FC Dallas de Pareja, un equipo que se había acostumbrado a los halagos y al éxito tras convertirse en uno de los clubes más dominantes de la MLS en los últimos años. Fue de la mano del colombiano que Dallas se hizo a dos títulos el año pasado – el Superliderato y la Copa Abierta de EEUU – convirtiéndose en favorito automático para la campaña 2017.

Sin embargo, la realidad ha sido muy distinta de cara a un nuevo clásico ante Houston Dynamo este miércoles (8 p.m. ET | UniMás). Con 35 puntos, Dallas ocupa la quinta posición en la Conferencia del Oeste y llega al clásico texano necesitando sumar ante un rival directo, el cual tiene dos puntos más y se encuentra en el tercer lugar de la tabla.

El reciente bajón de Dallas en el último mes ha sido sorpresivo, pero las indicaciones de un posible descenso han estado ahí desde hace ya un tiempo. El bajo nivel del Jugador Franquicia Cristian Colmán ha sido notable. El paraguayo, quien eligió a la MLS a pesar de haber despertado interés en el fútbol mexicano, solamente ha anotado dos goles en 18 partidos y solo ha salido de titular en nueve ocasiones… números sombríos para un jugador que estaba perfilado a ser estrella.

Ante la falta de gol de Colmán, FC Dallas se inclinó en el trabajo del argentino Maximiliano Urruti, quien brilló hasta el mes de julio al acumular 11 goles y cinco asistencias, un récord personal para el delantero en seis temporadas en la MLS.

El problema de depender de un solo atacante para anotarle al rival radica en la posibilidad de que ese jugador entre en una sequia goleadora, lo cual fue exactamente lo que pasó con Urruti después del 4 de julio. El argentino no ha marcado en cinco partidos desde esa fecha y no es coincidencia que en ese tiempo FC Dallas haya logrado solamente un triunfo.

Las dificultades para FC Dallas no terminan ahí. El problema más grande del club no es adelante… es el medio. Es un problema que existe en el equipo desde el año pasado cuando Mauro Díaz cayó lesionado. El volante argentino era quien tiraba los hilos del club desde una posición creativa en el centro del campo y tras caer el pasado 16 de octubre con una ruptura en su tendón de Aquiles, FC Dallas no ha sido el mismo.

Dallas logró adaptarse a la ausencia de Díaz con la ayuda del juvenil Kellyn Acosta y la velocidad de Michael Barrios por las bandas, pero nunca ha llegado a ser igual de dominante. Díaz se ha venido recuperando lentamente, pero no ha sido el mismo, hasta el punto de no figurar en la alineación titular del equipo. Pareja tendrá que resolver el problema creativo mientras Díaz sigue buscando el nivel que lo llevó al estrellato en 2016.

Por lo pronto, FC Dallas y Pareja están a tiempo de resolver sus inconvenientes. El club jugó un buen partido ante Sporting KC en una plaza difícil de conquistar (Kansas City no ha perdido en casa este año). Esa recuperación tiene que empezar ahora, ya que la continuidad de esta “mini-crisis” podría significarle a Pareja el final de la dinastía que ha creado en Texas.