Inicialista en los tres partidos de temporada hasta el momento para su equipo, ya con gol y asistencias en su haber, y llegado este año a la MLS, el ecuatoriano Cristian Penilla busca aportar su experiencia al New England Revolution.
Con gol y asistencias, el ecuatoriano Cristian Penilla es el nuevo motor de New England
El nacido en el puerto de Esmeraldas es una de las mayores sorpresas ofensivas en el inicio de la temporada 2018 de la MLS.
“Me adapté muy rápido al equipo, a la liga gracias al trabajo y a los compañeros que me han ayudado”, dijo al respecto el atacante a FutbolMLS. “Eso se nota en el campo de juego porque estoy evolucionando más rápido de lo que pensaba”.
Con 26 años, su experiencia ha sido importante a la hora de adaptarse a los nuevos retos de la liga estadounidense. “Siempre he tratado de jugar fuera del país y eso me ha hecho más sencillo adaptarme a los cambios”, aseguró el nacido en Esmeraldas.
Penilla es una de las mayores revelaciones de toda la liga en el inicio de la temporada 2018, y uno de los motores de unos 'Revs' que buscan volver a ser protagonistas y que vienen de alzarse con una importante victoria a domicilio ante Houston Dynamo. El extremo ecuatoriano volvió a ser un actor principal, esta vez en suelo texano.
Tras su paso por el fútbol de su país, México y Brasil, el ecuatoriano no ve muchas diferencias en lo que se pide a los jugadores. “La MLS Es una liga muy competitiva, nadie da una pelota por perdida y todos los partidos son intensos”, incluso dejó un mensaje a los críticos de la liga, “no es como dicen muchos, que la MLS es fácil. Cuando estás acá te das cuenta que todos quieren meter y ganar”.
Y puso más argumentos, “hoy por hoy no hay grandes diferencias entre las ligas. Todos los partidos son difíciles”, para cerrar con una afirmación más global. “Ahora en el fútbol, el que no trabaja y no corre, no le alcanza. El talento no es suficiente en ningún lado”
Cristian aseguró que no habló con colegas de profesión o nadie que le diera referencias de la MLS o el New England Revolution, sino que analizó la propuesta en su círculo cercano. “Decidí venir por el bien de mi futuro”.
Un futuro en el que bien podría estar el frío de New England por largo rato: el ecuatoriano llegó a préstamo por un años con opción de compra. Él reconoce que le pegó duro el choque, pero asegura que está acostumbrándose.
“No pensé encontrarme tanta nieve”, dijo entre sonrisas. “Es lo más frío que me ha tocado vivir”. Y nadie puede culparlo; el atacante nació en un lugar más templado, en un puerto sobre el mar. “Ahora este es el clima de mi casa y me tengo que acostumbrar, hace mucho frío pero igual ya estoy acostumbrando a todo”.
Y es que las experiencias de Penilla lo han puesto bastante fuera de su zona de confort. En 2017 llegó a Chapecoense en Brasil, justo cuando el equipo llevaba varios meses reconstruyéndose tras la tragedia sucedida en Colombia.
“Sí, fue muy emotivo todo. La experiencia fue más eso, emotiva, más que cualquier otra cosa”, lo dice con el sabor amargo de no haber podido jugar y tener continuidad. “Yo entrené al máximo para ganarme un lugar, me lo gané al llegar, pero con el cambio de técnico me quedé sin opciones”, aceptó.
Sin embargo se mostró complacido por los momentos vividos alrededor de esa cruda historia de superación en la ciudad brasileña. “Fueron seis meses, cuando mi contrato era de un año, no pude jugar mucho pero quedé muy agradecido con la gente porque todos me trataron muy bien”.
De vuelta en New England, el ecuatoriano tiene claro lo que Brad Friedel, su nuevo entrenador, busca en él. “Me pide que vaya hacia adelante, que cuando no tenga la pelota ayude a marcar. Pero que encare, y vaya con libertad para hacer lo que siempre he hecho”.
Cristian Anderson Penilla Caicedo, de buen arranque y con ganas de más, dice que se hará acompañar pronto en Boston de su novia, sus hijos y un primo para sentirse acompañado en la nueva aventura. “Es complicado estar sin familia”.
Y si el comienzo fue bueno, acostumbrándose al frío y la soledad, cuando mejore el clima y llegue la compañía solo espera mejores cosas. “Soy un jugador que la lucha todo el tiempo y quiere jugar siempre”.