A mediados de la temporada 2007, Dave Sarachan fue despedido del cargo de director técnico del Chicago Fire. El presidente del club, John Guppy, decidió traerse desde Millonarios de Colombia a Juan Carlos Osorio para reemplazarlo.
Juan Carlos Osorio uso a la MLS como su primer laboratorio de experimentos
Antes de triunfar en Atlético Nacional, de tomar las riendas del Sao Paulo y dirigir a la selección de México, Osorio ya hacia rotaciones y cambios en la MLS.
En medio año, “El Profesor”, sobrenombre que le daban los jugadores para describir su incesante micro gestión y su estudiosa naturaleza, levantó al Fire para clasificarse a los Playoffs, eliminar en instancias finales por primera vez al DC United y los llevo hasta la final de la Conferencia Este donde se enfrentó al New England Revolution.
Jim Curtin, hoy entrenador del Philadelphia Union, es de los que quedo más sorprendido con los métodos de Osorio.
Para comenzar, movió a Curtin para desempeñarse como lateral izquierdo, una posición que nunca había realizado. Pero quedo aún más sorprendido, cuando en el entrenamiento previo a la final de conferencia, la práctica fue un juego de Hándbol.
“Todo era extremo con él. Cuando creías que lo tenías descifrado, siempre te daba un giro que te mantenía de pie”, dijo Curtin.
Osorio es hoy el seleccionador de México, y en cuanto a resultados, uno de los más exitosos en la historia de El Tri con un impresionante record en uno de los banquillos más calientes en el fútbol internacional. Y su paso por la MLS, lo proveyó con una necesaria experiencia para lo que estaba por implementar en México.
Tras caer en la final de conferencia ante los Revs por 1-0, se marchó para dirigir a los New York Red Bulls. A los taurinos los llevó a su primera, y hasta hoy única final de la MLS, en 2008. Pero en 2009 decidió hacerse a un costado tras una mala campaña.
Y aunque su paso por el Fire fue fugaz, su introducción con el primer equipo, fue una mirada a lo que habría de convertirse Osorio como técnico.
“La intensidad cuando Juan Carlos entró al cuarto, fue como ‘Wow, esto va a ser diferente’”, comentó Curtin.
Su trabajo rápidamente lo llevo a ser considerado un pensador, cambiando sutilmente formaciones y alineaciones en cada partido tras exhaustivas sesiones de reportes de scouteo y de video. Osorio se enorgullecía de ser el hombre más preparado en la habitación. Su famoso pizarrón magnético siempre estuvo presente, a tal grado que los jugadores que lo iban a ver a su oficina, lo encontraban regularmente haciendo movimientos y alineaciones en él como un científico combinando elixires.
En ocasiones hasta dormía en las instalaciones del club, y su personalidad dejaba una impresión inmediata.
“Sabía lo que quería, y sabia como quería llegar a ello. Con esa claridad, eso obviamente nos ayudó a ir en la dirección que él quería”, dijo Chris Rolfe, jugador de Chicago en 2007.
La meticulosidad de Osorio creció aún más en su estancia en Red Bulls. Jeff Agoos, director deportivo de los neoyorquinos en aquel tiempo, recuerda que Osorio le pedía más videos de los oponentes a todas horas del día. Y cuando Agoos visitaba a Osorio, quien vivía a una cuadra de su casa, la escena era siempre la misma.
“Sus niños estaban jugando arriba, la esposa estaba haciendo algo, y el solo tenía los videos y su nota de apuntes frente a él”, dijo Agoos. “Tomaba notas meticulosas una y otra vez y otra vez sobre los rivales que enfrentaría”.
El defensa central Carlos Mendes, jugador de Red Bulls bajo el mando de Osorio fue habilitado como contención por primera vez con el ‘Profe’. Y recuerda bien la intensidad y la pasión del colombiano.
“Recuerdo de la primera junta con el equipo, cuando habló del futuro y su visión a futuro del club, recuerdo haber salido de la junta pensando que ama su trabajo, es pasional y muy intenso”, dijo Medes.
En NYRB parecía que siempre había una nueva frontera por descubrir, una nueva rotación por explorar, una táctica diferente por utilizar. En ocasiones cambiaba de un 3-5-2 a un 4-2-3-1 o a un 4-3-3 en tres juegos consecutivos.
Pero sus métodos tenían la tendencia de desgastar a algunos jugadores, que fue lo que ocurrió en 2009.
“No creo que los jugadores estadounidenses se preparen de la misma manera para los entrenamientos y partidos de la misma manera que Juan Carlos lo hace. Creo que debe estar en el ambiente correcto (para hacerlo). Creo que la cultura con la selección mexicana, de lo que se trata, va bien con la manera que Juan Carlos se prepara para los partidos”.
Osorio es un técnico internacional único, que se pulió en la MLS antes de ascender a destinos elevados en la escalera mundial. Y para aquellos que jugaron bajo su dirección y dirigieron a su lado, el ascenso del ‘Profesor’ tiene todo el sentido del mundo.
“Creo que cualquier entrenador que haya venido a nuestra liga cuando aún no tenían un nombre reconocido, y luego va a grandes lugares, ayuda a la liga a crecer y en particular a los técnicos a tener más respeto”, dijo Curtin. “Creo que es bueno tener a alguien que ve el juego diferente como un Juan Carlos Osorio. Es uno de los directores técnicos más singulares que haya conocido”.