Jesús Ferreira paso la mayoría de la temporada pasada a préstamo con el cuadro de Tulsa en la USL (segunda división), una experiencia que ha probado por demás benéfica para el delantero de la cantera del FC Dallas.
La segunda división y el consejo de su padre forjan el camino del nuevo goleador de FC Dallas
Jesús Ferreira carga un nombre de peso en la institución texana, pero a su corta edad, el canterano da indicios de un futuro prometedor.
Y eso no solo fue porque el hijo de David Ferreira, MVP de la MLS con Dallas en 2010, haya anotado goles con el club de Oklahoma, sino porque también ganó algo muy valioso cuando se tienen escasos 18 años: confianza y experiencia.
“Realmente no estaba jugando mucho aquí en Dallas bajo las ordenes de Óscar Pareja, apenas algunos minutos, así que fue bueno ir a Tulsa, acumular valiosos minutos y muchos juegos”, dijo el joven Ferreira.
Cuando menciona que jugó poco con Pareja como director técnico de los Hoops, no está exagerando. Entre 2017 y 2018, apenas jugó 22 minutos en dos apariciones con el primer equipo.
La temporada actual ha sido otra historia. Ferreira ya ha jugado en dos duelos, uno de ellos como titular, ha marcado un gol y registrado dos asistencias, las cuales todas se dieron en la reciente victoria a domicilio de 4-2 frente a Real Salt Lake.
Luchi González, quien lo entrenara en las fuerzas básicas de FC Dallas y quien ahora lo dirige en el primer equipo, está de acuerdo en que la experiencia de Ferreira en Tulsa ha sido fundamental para su crecimiento y que ahora pueda tener minutos con el club texano.
“Muy importante que haya ido allá”, dijo Luchi. “Anotó seis goles en una liga que es muy competitiva. Siento que absolutamente le ayudó a ganar confianza y saber que puede anotar goles profesionalmente y no depender del físico o el atletismo, sino de ser inteligente, rápido mental y físicamente, ser técnico y hacer movimientos con timing adecuado”.
Otra razón que dan como resultado el éxito presente de Ferreira es que González es el técnico, y entrena al equipo de manera similar a como lo hacía en las juveniles con varios de los integrantes del plantel del primer equipo actual habiendo surgido de esa misma cantera.
“Creo que entiendo bastante su sistema por mi tiempo en las juveniles con él. Tiene cosas muy similares que hacíamos en las fuerzas básicas, así que creo que estoy un paso adelante al saber qué es lo que quiere, a donde quiere que nos movamos y cosas de ese tipo”, dijo Ferreira.
Jesús también le da crédito a su papá, de 39 años de edad y quien actualmente juega en Colombia para la Unión de Magdalena.
“Siempre se mantuvo muy positivo”, comentó Ferreira. “Me decía que solo esperara a que llegara mi momento y cuando lo tenga, no lo deje escapar”.