Con la caída como local el pasado domingo ante Seattle Sounders, el equipo de Vancouver Whitecaps quedó fuera de la lucha por la clasificación a los Playoffs de la temporada 2016. En las palabras de su entrenador, Carl Robinson, el año del equipo canadiense ha sido frustrante y deja mucho espacio para la reflexión y la planificación del trabajo y la conformación del plantel para el año próximo.
Las 5 cosas que nos dejó el equipo de Vancouver Whitecaps FC en la temporada 2016
Tras un buen rendimiento en 2015 el comportamiento del club canadiense en la MLS 2016 fue bastante decepcionante.
¿En qué fallaron los 'Caps? ¿Existió algún punto positivo en el curso que está cerca de finalizar? A continuación, cinco aspectos destacables que nos deja el año futbolístico de Vancouver.
Un buen inicio, un decepcionante final
El inicio de la temporada 2016 nos hizo pensar que los Whitecaps seguían en la misma frecuencia que usaron en 2015, cuando finalizaron en la segunda posición de la Conferencia Oeste con 53 puntos.
Pero con el paso de las semanas la producción fue decayendo de manera visible, especialmente desde el inicio del verano en adelante. El club del Pacífico canadiense quedó fuera de juego sin poder entrar a la postemporada, ganando apenas uno de sus 12 encuentros más recientes, exhibiendo un bajo estado de forma en el momento más crucial.
Malas decisiones en el armado del plantel
Desde el comienzo de su gestión en Vancouver Whitecaps en 2013 el técnico Robinson demostró que tiene talento para identificar jugadores valiosos. Sin embargo, esa habilidad no funcionó en 2016 de la manera que él y el equipo hubieran deseado.
Con el año virtualmente finalizado para los ‘Caps, las transferencias de Steven Beitashour (a Toronto FC) y Gershon Koffie (a New England Revolution) resultaron muy perjudiciales para el desenvolvimiento del conjunto de Robinson en la liga. Vancouver jamás recuperó la solidez defensiva que tenía antes de desprenderse de ambos futbolistas.
Con la excepción de Christian Bolaños, quien mostró en ocasiones su talento, las adiciones de Giles Barnes y Masato Kudo en la ofensiva estuvieron por debajo de las expectativas. La prolongada ausencia de Kekuta Manneh por lesión fue otra cuestión que los Whitecaps no pudieron resolver dentro de una temporada en la que el equipo marcó muy pocos goles.
Algunos jugadores fundamentales no aparecieron
Pedro Morales: El jugador franquicia chileno borró en 2016 todas las buenas sensaciones que generó en 2015. No solamente este año marcó pocos goles (todos de penal), sino que su visión de juego y su capacidad de distribuir el balón se vieron muy mermadas en los últimos meses. El sudamericano dio a entender tiempo atrás que esta podría ser su última temporada en la MLS.
Kendall Waston: Uno de los mejores y más físicos defensores de la liga en las últimas temporadas pasó bastante desapercibido este año. En general el costarricense se mostró falto de confianza en la retaguardia de Vancouver. Quizás es quien más sufrió en la cancha las ausencias de Beitashour y Koffie.
Cristian Techera: El atacante uruguayo tiene un enorme potencial, como ya demostró en 2015. Si bien mostró en los últimos meses un alto rendimiento en la Liga de Campeones de la CONCACAF, no fue capaz de traducir ese buen momento en los partidos de la MLS. Como el resto de los atacantes de los Whitecaps Techera marcó pocos tantos en la competición doméstica y no pudo volver a poner sobre la cancha el gran entendimiento con sus compañeros en la ofensiva que sí estuvo presente en 2015.
Mal en la MLS, bien en la CCL
Si bien el rendimiento en la liga local ha sido muy frustrante a nivel internacional Vancouver ha destacado al imponerse en el Grupo C de la Liga de Campeones de CONCACAF. Los Whitecaps finalizaron primeros en esa fase, con cuatro victorias en cuatro partidos, en una complicada zona en la que compitió ante Sporting Kansas City y Central FC de Trinidad y Tobago.
Nace una estrella
El final de temporada dejó una sonrisa y una esperanza para los aficionados del club. Desde hace algunas semanas Vancouver Whitecaps cuenta en su primer equipo con Alphonso Davies, de apenas 15 años. Nacido en Liberia, actual residente de Canadá, Davies protagoniza una de las mejores historias de la MLS en la actualidad. El chico, que en noviembre cumplirá 16 años, quizás a futuro sea el mejor legado de Robinson, quien recientemente le dio al adolescente la posibilidad de debutar (y permanecer) en el primer equipo.
Davies es un talento natural, que arranca sus jugadas como atacante por las bandas, pero que parece estar capacitado para jugar en cualquier posición de ataque. Tan altas son las expectativas que se han generado alrededor del canterano que en el último encuentro frente a Seattle Sounders distintos medios locales e internacionales aseguraron que un visor del Manchester United siguió de cerca su partido en el BC Place.