Columbus Crew entraba como favorito para llevarse la semifinal de la Conferencia Este ante un club de expansión, que de acuerdo a las expectativas, ya estaba muy por encima de ellas por lo cual lo que viniera desde que lograron su clasificación a los Playoffs - ya es todo ganancia.
Lucas Zelarayán y Gyasi Zardes guían a Columbus a la final de la Conferencia Este
El argentino y el estadounidense descifraron el cerrojo de Nashville en los tiempos extras. El tico Luis Díaz colaboró con una asistencia.
Nashville SC llevó el partido al límite con sus trabajadas y eficaces armas. Pero al final la calidad de los jugadores distintos de La Pandilla de Ohio que no habían podido descifrar la fórmula para ganarlo en los 90 minutos de tiempo regular, encontraron las soluciones adecuadas para que Columbus lograra imponerse por 2-0 en los tiempos extras.
No fue la mejor tarde de Lucas Zelarayán, Gyasi Zardes o Darlington Nagbe. Sin embargo, cuando quedaron visiblemente abiertas las rendijas para inclinar la balanza a favor del Crew, fueron quirúrgicos y contundentes.
Zelarayán y Zardes armaron la jugada del primer gol a los 100 minutos por la banda izquierda, para que Pedro Santos simplemente chocara el esférico y todos a celebrar. Los cracks de La Pandilla se asociaron a la perfección en esa jugada. Irónicamente, consiguieron agarrar mal parada a las sólidas líneas bajas de los visitantes mediante un saque de banda atrás de la media cancha.
Nashville ya cansado y con el golpe anímico, no tuvo ni chance de reaccionar, y cuando se dio cuenta ya tenía otro gol en contra. El costarricense Luis Díaz le filtró a Zardes, y el delantero estadounidense resolvió con clase.
El conjunto de Tennessee se había apegado al plan de juego que lo llevo hasta el punto en que se encontraban. Un equipo sumamente consiente de sus fortalezas y alcances, ordenado en todas sus líneas, y paciente para encontrar sus oportunidades al frente.
Y tal como dictaba el libreto, el Crew se aferró a la posesión, a proponer y ser el que llevara el peso del partido. Pero siendo el equipo “con todo que perder”, su accionar se percibía más precavido de lo que regularmente suele ser.
Nashville encontró sus mejores oportunidades con el balón parado, en especial en tiros de esquina. Los peligrosos cabezazos de Dax McCarty y el venezolano Jhonder Cádiz no terminaron en la red gracias al travesaño y al arquero Andrew Tarbell, respectivamente.
Mientras que Columbus batallaba para tener volumen de juego significativo en el área de los visitantes, los minutos transcurrieron e hicieron inevitables los tiempos extras. Pero Caleb Porter, técnico del Crew, mantuvo la confianza en su XI y los mantuvo sin cambios hasta que cayeron los goles. Se murió con la suya, y le redituó.
Columbus jugara la final de la Conferencia Este ante New England Revolution el próximo domingo.