El capitán David Villa lo dijo el pasado domingo en el Yankee Stadium, luego de ser eliminados por Toronto FC. La temporada 2016 de New York City FC representó una gran mejora con respecto a lo que el equipo había mostrado en 2015, su primer curso en la MLS.
Pese al fracaso en los Playoffs, New York City FC cierra con satisfacción la temporada 2016
El equipo de la MLS quedó eliminado en las Semifinales de Conferencia, y ahora se enfoca en resolver varios asuntos de cara al próximo año.
Con Patrick Vieira al frente del cuerpo técnico el conjunto celeste fue de menos a más durante todo el año. De las enormes carencias defensivas del inicio de la temporada -que se tradujeron en una acumulación de malos resultados obtenidos como local- NYCFC pasó a ser un equipo confiable dentro y fuera de casa, y llegó casi hasta el final de la temporada regular con opciones concretas de ser el primer clasificado de la Conferencia Este.
El exinternacional francés reemplazó a comienzos del año a Jason Kreis. Sin experiencia previa al frente de un equipo de primera división (aunque con un importante paso por la escuadra de reservas del Manchester City en Inglaterra) a Vieira se le notó desde el comienzo una condición que lo diferenció de la gran mayoría de los entrenadores de la MLS.
El campeón del mundo en 1998 se mostró abierto a la experimentación. Distintas fueron las disposiciones que presentó a lo largo del año en la defensa, el centro del campo y el ataque, siempre tomando como modelo base el dibujo táctico de 4-3-3. Vieira mantuvo la osadía hasta las últimas instancias. Poco antes de ingresar a los Playoffs el técnico quitó la titularidad al veterano portero Josh Saunders para dar la opción en los últimos partidos al joven noruego Eirik Johansen.
Una campaña regular que finalizó en gran forma y unos Playoffs (los primeros en la historia para la franquicia neoyorquina) que fueron una experiencia calamitosa. De esa manera puede resumirse el segundo año de vida de NYCFC. Como ocurrió en 2015 el gran Talón de Aquiles del equipo sigue estando en la defensa, donde -pese a todos los cambios que ella se operaron- el funcionamiento sigue estando lejos del ideal.
Este año llegó una pequeña multitud de defensores al plantel: Ethan White, Diego Martínez, Rónald Matarrita, Fŕedéric Brillant y Maxime Chanot. Estos dos últimos terminaron siendo la opción preferida de Vieira para activar el centro de la defensa. Pese a que el francés y el luxemburgués ya habían jugado juntos en el fútbol europeo, la reedición de esta sociedad en Norteamérica no fue del todo exitosa. Los 7 goles que la zaga permitió en las Semifinales de la Conferencia Este son prueba de ello.
Fuera del agujero negro de la última línea, el plantel definitivamente creció en 2016. Los tres grandes jugadores europeos que llegaron en el verano del año pasado (Frank Lampard, Andrea Pirlo y Andoni Iraola) mejoraron considerablemente sus prestaciones en la temporada que terminó. Tras una larga recuperación el volante inglés protagonizó uno de los retornos más espectaculares en la historia de la liga, en el que consiguió marcar una docena de goles en 15 partidos de liga. Mientras el italiano y el español parecen estar dentro de los planes a futuro del club existen dudas sobre la continuidad de Lampard, quien finaliza su vínculo con el equipo en diciembre.
El costarricense Rónald Matarrita y el inglés Jack Harrison -jóvenes y contratados este año- demostraron ser un acierto absoluto. ‘Mata’ fue una de los principales argumentos ofensivos de NYCFC desde la banda izquierda, mientras que el número uno de la selección del SuperDraft probó que el esfuerzo que el equipo hizo por él realmente mereció la pena.
El cuadro del barrio del Bronx está obligado a ser protagonista y el mandato que tendrá en 2017 será el de no solamente clasificar nuevamente a la postemporada sino el de ser exitoso en los Playoffs.
Para lograrlo Vieira y la directiva del club tendrán que hacer varios movimientos en el plantel. Se impone la contratación de al menos un defensor central de categoría y quizás un lateral por izquierda que pueda estar a la altura de lo que Matarrita produce por banda derecha. A la espera de que el equipo de Nueva York decida qué hacer con Lampard (quien finaliza contrato en diciembre) no sería alocado pensar en un volante ‘box-to-box’ y en intentar asegurar la permanencia de Federico Bravo y Mikey Lopez o el fichaje de futbolistas de características similares.
Steven Mendoza, Tommy McNamara, Shelton y Harrison han sido buenos elementos ofensivos, pero no hay nadie de la categoría de David Villa en la delantera. Un delantero de buena producción goleadora es necesario -casi indispensable- para apuntalar el gran trabajo que el asturiano viene realizando desde su arribo a la MLS.
La amargura de la rápida eliminación en los Playoffs pronto se borrará. Pero New York City FC tiene una complicada labor por delante durante los meses de invierno. Las expectativas que el conjunto azul cielo ha generado son altísimas. Las piezas que la franquicia necesita para mejorar en 2017 son elementos de precisión, con capacidad para marcar diferencias dentro de un equipo que ha conseguido sobresalir en 2016.