Portland Timbers es un club que se hace muy fuerte de local, tanto que muchos pasan de largo que en realidad es el visitante más productivo del 2015 en la MLS.
¿Por qué es Portland Timbers el mejor visitante de la MLS en 2015?
A Portland se le da mucho crédito por su capacidad como local, pero su fuerza jugando en cancha ajena es igual de temible.
Contando los 17 partidos que disputó como visitante durante la temporada regular y los 2 juegos en la misma calidad durante los Playoffs, los Timbers tienen un record de 8 ganados, 8 perdidos y 3 empates. Nadie alcanza la cifra de triunfos jugando en patio ajeno, que tiene el club de Oregón.
PINTABA PARA DOBLE CARA
Portland Timbers tiene todos los elementos para hacerse fuertes en su casa del Providence Park: el apoyo del Timbers Army, su peculiar cancha de pasto artificial y el clima al que está acostumbrado el cuadro de Cascadia. Hasta este año, cada vez que salían como visitante la historia era totalmente distinta.
En los primeros 11 encuentros que los Timbers jugaron como visitante, recibieron 21 goles, lo que nos da un promedio de casi dos goles recibidos por partido. En contraste, la ofensiva solo encontró el arco rival en 8 ocasiones, lo que nos da un promedio considerablemente menor a un gol por partido.
De esos 11 partidos, perdió 7 de ellos, tan solo pudo sacar la victoria en 3 ocasiones y un empate sin goles. Y a sus tres partidos ganados, se les puede quitar el mérito fácilmente, ya que fueron frente a New York City FC, Colorado Rapids – quienes ni siquiera clasificaron a los Playoffs, y frente a Montreal Impact cuando pasaban por un mal momento en la liga por estar enfocados en la CONCACAF Champions League.
EL MOMENTO MÁS BAJO
En pleno verano, vinieron tres derrotas de visitante muy dolorosas, de manera consecutiva, y por goleadas escandalosas. Cayeron 5-0 ante el LA Galaxy, 3-0 ante Philadelphia Union y 4-1 ante el FC Dallas. Una patética producción de 12 goles encajados, y tan solo 1 gol anotado. Siendo los angelinos y texanos rivales de la misma Conferencia, y que en ese momento se veían muy superiores a Portland. Pocos podían esperar este presente.
VISITANTE DE RESPETO
Fue entonces que las vino el punto de quiebra para los Timbers. En los siguientes 8 partidos como visitante (ya contando los Playoffs), registraron un récord de 5 triunfos, 2 empates, y tan solo una derrota. Marcaron 14 goles que dan a un promedio magnifico muy cercano a los dos goles por partido, y recibieron 8 goles en contra, reduciendo significativamente el promedio de dos recibidos en los primeros 11 juegos, a tan solo uno por partido en los ocho recientes.
En esa racha favorable en patio ajeno, volvieron a visitar cuatro estadios donde habían caído derrotados en la primera parte de la temporada. Habían caído en Vancouver, Seattle, Dallas, y Los Ángeles. Aprendieron su lección, y en su segundo intento, solo volvieron a caer en Seattle (en un partido que dominaron), golearon en LA Galaxy devolviéndole la cortesía de la goleada encajada anteriormente y, ya en Playoffs, sacaron lo que necesitaban de Vancouver Whitecaps y FC Dallas, un triunfo en Canadá y un empate en Texas que los llevó hasta la final de la MLS Cup.
Por si fuera poco, en esa racha positiva en la segunda parte de la temporada, derrotaron 2-1 al Columbus Crew en el MAPFRE Stadium, precisamente el rival y la cancha donde jugaran la gran final.
LA PÓCIMA TIMBER
¿Qué es lo que hicieron los dirigidos por Caleb Porter para cambiar dramáticamente sus resultados como visitante?
Más allá de fórmulas mágicas o sistemas de juego, fue lo que Portland se dio cuenta era lo que le funciona jugando en condición de visitante, ejecutar el plan y como más de uno con eso terminaría tragando el polvo.
En 5 de las 7 derrotas como visitante en sus primeros 11 partidos, en menos de 20 minutos de partido ya perdía por lo menos por un gol. Y en los tres partidos que gano en ese lapso, solo recibió dos tantos, y los dos tantos llegaron ya pasados el minuto 70 y con Portland arriba en el marcador.
Es ahí donde principalmente el sistema defensivo cobra relevancia, con especial crédito para la zaga defensiva en las cuales habitualmente se encuentran Jorge Villafaña, Nat Borchers, Liam Ridgewell, y Alvas Powell, sin dejar de lado al arquero Adam Kwarasey. Y que en la buena racha, solo ante Seattle (el único ante el que perdieron en ese lapso), volvieron a permitir un gol tempranero.
Ofensivamente la productividad se elevó significativamente, pero no fue a base de ir a buscar los partidos durante los 90 minutos, sino a través de saber manejar y leer los tiempos del partido y atacar en el momento justo.
De los 14 goles anotados en la racha positiva, 12 de ellos llegaron en la segunda mitad, y todos con excepción de uno, equivalieron a la eventual victoria o favorable empate. La paciencia de la ofensiva pago sus dividendos, tanto que incluso la cuota goleadora de esos 14 goles se lo dividieron entre 7 jugadores, siendo Fanendo Adi el que más convirtió.
Y esa paciencia se mantuvo aun cuando el rival logro alcanzarlos una vez que Timbers tomo la ventaja inicial. Ya que a la postre, el desgaste del rival y la confianza de los leñadores de atacar en el momento justo, les acabo por enseñar la ruta al tanto del triunfo.
Un ejemplo perfecto es el partido que jugaron ante Columbus Crew. Adi le dio la ventaja a Portland, pero Crew empato cortesía de Kei Kamara y parecía con eso la Pandilla tomaba control del partido, pero Adi volvió a vacunar en el momento justo para liquidar el partido a favor de los Timbers.
EL VENTAJOSO PRIMER GOL
Otra clave de los partidos como visitante para Portland, es que quien tome la ventaja tiene más de medio partido ganado. Contando los 19 partidos como visitante de los Timbers, solo en una ocasión hubo una remontada. El día que los de Oregón golearon 5-2 al Galaxy en el StubHub Center, los galácticos habían anotado el primer tanto. Tan solo una vez, el que empezó ganando, terminó empatando. Fue el más reciente duelo ante FC Dallas, en el que Portland comenzó ganando y, al fina,l fue un empate a dos tantos.
De los otros 17 partidos, dos terminaron en empates sin goles, y en 15 de ellos -en otras palabras en más del 75% de sus encuentros- quien anota el primer gol, termina con la victoria.
Así que según el desempeño de Portland como visitante en el 2015, quien logre anotar primero en la final de la MLS Cup el próximo domingo, tendrá más de la mitad del trabajo hecho para poder alzar la copa de campeón.