Antes de que Giovanni Savarese pudiera cambiar la alineación, el sistema de juego o la táctica de su equipo, él tenía claro que lo primero que debía modificar era el ambiente en los entrenamientos.
Solidarios, divertidos, y rodeados de un buen ambiente, los Timbers de 2018 son obra de 'Gio' Savarese
Con la llegada del entrenador venezolano el ambiente en las prácticas cambió de manera radical. Esa renovada mentalidad llevó al equipo hasta la final por la MLS Cup.
Sus jugadores siempre se mostraban joviales y amables fuera de las sesiones, pero una vez que las prácticas comenzaban el ánimo en el plantel era de una calma intensidad. Con Savarese -incluso durante los Playoffs- las prácticas reflejan la alegría por el juego. En un análisis superficial podría parecer que el equipo está demasiado relajado, algo con lo que Savarese coincide en principio, pero emplea otra palabra para definirlo.
"Es algo más 'difrutable' que 'relajado'", explicó a MLSsoccer.com en el centro de entrenamiento de su equipo. "Porque todo el mundo está en buen estado, todo el mundo está preparado. Todo el mundo está preparado mentalmente para dar lo que necesitamos en los partidos. Así que es más un ambiente divertido que un ambiente relajado".
"Siempre es importante tener una buena cultura y una gran mentalidad", añadió. Y eso para Saverese comienza con crear un entorno de entrenamiento que alienta tanto la solidaridad como el regocijo derivado de jugar fútbol. El entrenador cree que la unidad que muestran los Timbers en 2018 es un resultado directo de "un buen vestuario" y de un cuerpo técnico que se "asegura que los muchachos disfruten las prácticas".
Y eso, para jugadores como Zarek Valentin, se traduce directamente en el terreno de juego.
"Muchas veces cuando los goles llegan es fruto de la improvisación y de gente que corre hacia espacios libres y de la conexión, como ocurre cuando Diego Valeri juega con Sebastián Blanco. Es un 1-2 rápido", expresó el defensor. "Luego ves a Diego Chará solapando las posicones, cambiando de lugar. Eso no ocurre porque sí".
"Por eso me ven celebrar de manera tan evidente cuando hacemos un gol", continuó Valentin. "Porque nos rompemos el alma para que nos nos hagan goles, y cuando esos muchachos anotas esos goles tan brillantes, somos los primeros en estar ahí porque nos ponemos felices por nuestros compañeros".
Valeri coincide: Savarese hizo del equipo una prioridad.
"Estaba muy preocupado desde la primera práctica para que fuéramos un grupo unido y fuerte", explicó el Jugador Más Valioso de la MLS en 2017. "Pase lo que pase, ganemos o perdamos, estamos juntos. Eso era importante".
La camaradería y las "buenas vibras" en el entrenamiento no quedan limitadas únicamente al plantel.
"La cohesión en nuestro grupo comienza de arriba hacia abajo", comentó Valentin. "El cuerpo técnico entrena, ríe y bromea con nosotros, ellos ganan o pierden con nosotros. Es un placer jugar para ellos. Te dan más ganas de ganar para ellos".
Combinemos eso con un gran ración de saber estar en los Playoffs -que los Timbers evidenetemente tienen- y la posibilidad de obtener la MLS Cup de golpe no parece tan lejana.
El equipo siente que no tienen nada que demostrar y que están de manera justa en la final del sábado frente a Atlanta United FC en el Mercedes-Benz Stadium (8 pm ET, UniMás).
"No estamos aquí porque convencimos a la gente de que ahora somos un equipo", expuso Savarese. "No, trabajamos porque creemos en nuestro equipo. Creemos en nuestros jugadores y esto es crédito para el trabajo que todo el mundo hizo".
"No somos los favoritos, ¿Pero a quién le importa?", reclamó Valentin. "Seremos todo el día el rival desvalido. Cumpliremos con ese papel y creemos en nosotros. Tenemos cohesión en el vestuario como para hacer un buen partido frente a Atlanta. Creemos en nosotros mismos. Al final del día eso es lo que realmente importa".