Todo lo que debes saber sobre la historia de Ezequiel Barco, la nueva joya de Atlanta United

Desde los primeros rumores acerca del interés de Atlanta United por Ezequiel Barco, muchos aficionados corrieron a revisar videos con las jugadas del argentino. Pero la historia del mediocampista ofensivo es tan destacable como su fútbol.

Recién coronado campeón de la Copa Sudamericana con Independiente, Barco fue además el autor del gol (tiro penal) en el histórico estadio Maracaná, que terminó otorgando el título al ‘Rojo’ de Avellaneda.

Para ir a los comienzos, Ezequiel fue bautizado como ‘Cara de viejo’ por sus compañeros en las divisiones inferiores de Independiente. Haciendo referencia a la apariencia facial de más años, en comparación con su edad.

Ezequiel nació (Marzo 29, 1999) en Villa Gobernador Valdéz en la provincia de Santa Fe, a unos 30 minutos de la ciudad de Rosario. Lugar de nacimiento de su actual entrenador en MLS Gerardo ‘Tata’ Martino’ y como muchos sabrán, del propio Lionel Messi. Rosario es una de las zonas más prolíficas de futbolistas en la Argentina.

Su primer entrenador fue Omar, su padre, quien luego de trabajar el turno de la mañana en una fábrica de ollas para cocina, regresaba a casa para irse junto a Ezequiel y su hermano Cristian a entrenar el equipo de chiquitines. El equipo logró salir campeón de la liga local que se disputaba entre escuadras con 7 titulares.

Desde entonces, Barco se ha considerado un volante externo o carrilero, al que le gusta hacer diagonales hacia adentro para quedar de frente al arco. Muchos lo ven además como alguien capaz de jugar como un volante de creación detrás de dos delanteros.

Además de Cristian, Ezequiel tiene otro hermano y dos hermanas. Esther, su madre, trabajaba limpiando casas y aún en 2017 ella no aceptaba dejar de trabajar, a pesar de la petición de su hijo para que se fuera a vivir con él.

Antes de llegar a Independiente, Barco intentó probar con las academias de Boca Juniors, Gimnasia de la Plata y River Plate, pero el mismo Ezequiel acepta que no estaba en su mejor nivel cuando atendió esas pruebas (tenía 15 años).

La situación se enderezó cuando Jorge Griffa, un reconocido formador de jugadores en Argentina, consiguió que Barco jugara en su academia hasta 2015, cuando finalmente llegó a las inferiores de Independiente de Avellaneda.

Ezequiel jugó un poco de Séptima Categoría y un poco de Sexta Categoría, antes de ser convocado para el equipo profesional del ‘Rojo’. Saltándose así gran parte del proceso de los juveniles que normalmente juegan Séptima, Sexta, Quinta, Cuarta y Reservas, antes de llegar al Primer Equipo.

Los primeros meses viviendo en la pensión de las divisiones inferiores en Avellaneda fueron duros. Ezequiel ha admitido que incluso lloraba todos los días por la ausencia de la familia, y llego a decirle a su mamá que iba a regresar a casa. Pero la familia tomó turnos para llamarlo y motivarlo a que siguiera luchando por su sueño.

El talentoso derecho ha contado que una de sus alegrías fuera de los entrenamientos, era esconderse para estar cerca de las prácticas del equipo profesional y soñar con qué tenía que hacer para poder llegar a jugar con ellos.

Una vez Barco firmó su contrato profesional, le pidió a sus padres que dejaran de trabajar y se fueran a vivir con él. Pero solo su papá aceptó la oferta, mientras que la madre siguió en Rosario con los otros chicos.

Gabriel Milito (ex FC Barcelona y selección Argentina como jugador) fue quien lo subió al primer equipo de Independiente. Barco debutó en la Primera División argentina el 8 de Agosto de 2016 y marcó su primer tanto el 10 de septiembre del mismo año.

Ya en 2017, Barco fue parte del seleccionado argentino Sub-20 que logró la clasificación al Mundial de la categoría (Corea del Sur 2017). Sin embargo, tras una larga polémica entre las directivas de Independiente y el cuerpo técnico del seleccionado, Ezequiel se quedó sin asistir a la Cita Orbital.

La nueva joya de Atlanta United y MLS jugó en total 57 partidos con Independiente de Avellaneda (38 por Liga, 3 por Copa Argentina y 16 por Copa Sudamericana), anotando 8 goles (5 por Liga y 3 por Copa Sudamericana).