El clásico canadiense, Toronto FC v Montréal Impact (para los despistados que no lo sabían), ha venido enriqueciendo su historia en los últimos años de manera notable, poniéndolo a la altura con los mejores y más pasionales de la MLS – quizás no en el sentido del marketing, pero en todo lo demás, no le pide nada a ningún otro clásico.
Toronto y Montréal llegan al clásico canadiense jugándose sus últimas cartas por un boleto a Playoffs
Los Escarlatas necesitan acortar distancias derrotando a su archirrival, el Impact se aferra a mantenerse con la última invitación a la fiesta grande.
Esté es de los clásicos que más allá de que ya contaba con dos aficiones que se antagonizan, geografía e ideología hasta de estilo de vida que son contraparte natural, ha llevado la rivalidad a escenarios de suma importancia que además han tenido encuentros épicos – de esos que hacen de un clásico muy especial. Y además, hay un balance, ninguno ejerce un dominio paternal.
De hecho, en sus últimos enfrentamientos en liga, cada quien se llevó el triunfo por la mínima jugando en propia cancha. Y en los dos anteriores, el que jugó en calidad de visitante se llevó la victoria con diferencia de dos goles. Así de parejo.
CLÁSICO QUE SE ACOSTUMBRÓ A BATALLAS EN LO MÁS ALTO
Por lo cual, el también denominado Derby 401, se ha acostumbrado a que el duelo sea por una lucha en los puestos de arriba – incluyendo finales del Canadian Championship, Finales de Conferencia en la MLS, y partidos de Playoffs. Por cierto, la gran mayoría definidos de manera dramática.
Vale recordar las dos finales que han disputado del campeonato canadiense en los últimos cinco ediciones, en 2014 Montreal ganó con un tanto en el minuto 90 +1 en el partido de vuelta, y en 2017, Toronto tomó revancha con un gol en el 90 +5 de Sebastián Giovinco.
En la MLS no cantan malas rancheras. En su primer enfrentamiento en Playoffs en 2015, Didier Drogba y Nacho Piatti se encargaron de humillar con goleada a los Escarlatas – precedido de que en la última jornada, Impact les arrebato la posibilidad de jugar en casa dándoles la voltereta en los minutos finales. Y en la final de Conferencia Este en 2016, a partidos de ida y vuelta, se tuvo que definir en tiempos extras con una espectacular seria que término a favor de Toronto por 7-5.
Pero en la temporada actual de la MLS, la situación será diferente. El duelo será de máxima importancia, pero no por pelear entre los punteros, sino para definir quién puede seguir con vida y luchar por conseguir uno de los últimos lugares de la Conferencia Este que otorgan boleto a la liguilla.
DUELO DE 9 PUNTOS
Un escenario más de emergencia, que de equipos protagonistas, como había venido siendo en los últimos años pero que igualmente tiene contexto para seguir alimentando la historia de este clásico.
Se suele decir que un partido es de “6 puntos”, pero este tiene alcance para ser de “9 puntos”.
¿Cómo puede ser eso posible?
El Impact es actualmente sexto del Este (último lugar con boleto a Playoffs), con 33 puntos sumados en 26 partidos disputados. Toronto está a nueve puntos del ansiado lugar que hoy ostenta su archirrival. Pero, los Escarlatas han jugado dos partidos menos.
Es decir, si Toronto gana los dos partidos menos que tiene, estaría a solo tres puntos de Montréal. De vencerlo, estarían igualados en puntos y habrías evitado que ellos sumen por obvias razones. Vencer al Impact podría representar cerrar una brecha de nueve puntos.
Montréal sabe de la importancia de estos tres puntos, ya que lo alejarían con más comodidad de sus cercanos perseguidores que quieren a como dé lugar arrebatarle el codiciado boleto. Pero mejor aún, ganarle al odiado rival, podría significar dejar al multi campeón Toronto en estado moribundo y prácticamente desahuciado. Una oportunidad muy apetecible y que no se presenta a diario, como para dejarla pasar.