Tras moldear a goleador de MLS, 'Titi' Henry influye en una de las grandes figuras de Rusia 2018

La última temporada de Thierry Henry con New York Red Bulls en MLS, fue una de 10 goles y 14 asistencias, y fue la segunda (primera completa) de Bradley Wright-Phillips en el equipo. El inglés terminó ese curso con 27 goles y dos asistencias.

Ese año, 'BWP' consiguió el 'Botín de Oro' de MLS, como máximo goleador de la liga norteamericana. Y los análisis indicaban que el inglés había conseguido tamaña temporada porque se había convertido en el ‘proyecto Henry’.

“Fui realmente un estudiante suyo. Incluso cuando yo pensaba que había hecho las cosas bien él me explicaba lo que había hecho mal”, explicó en su momento Wright-Phillips. “Lo llevé al entrenamiento y a cada uno de los partidos. Ojalá pueda recordar esas enseñanzas y ponerlas en la siguiente temporada”.

Pues bien, ya sin la tutoría del ídolo francés, el delantero inglés siguió rompiendo redes y récords. Volvió a conseguir el título de goleador en 2016 y está a tres tantos de su tanto número 100 en temporada regular (suma 106 anotaciones sumando los conseguidos en postemporada).

“En eso es en lo que más nos ayudó antes de irse. En tomar responsabilidades y no depender solamente de él”, explicó el delantero londinense tras la partida del francés al finalizar la temporada 2014 y justo antes de arrancar la 2015.

Thierry Daniel Henry dejó legado en MLS, en New York Red Bulls, y especialmente en un goleador que buscaba establecerse por sí mismo sin la sombra de su padre ('BWP' es hijo de Ian Wright, historia viva del Arsenal) en un país nuevo para él.

Un escenario bastante cercano al que ahora ‘Titi’ vive en el Mundial de Rusia 2018 con el astro belga Romelu Lukaku.

“Cuando las cosas iban bien, leía periódicos que me llamaban Romelu Lukaku, el delantero belga. Pero cuando las cosas no estaban saliendo em llamaban Romelu Lukaku, el delantero belga de ascendencia congoleña”, le dijo recientemente el goleador a The Players Tribune.

Allí nace la conexión con Henry, un ícono francés de ascendencia antillana, que se mantiene como el goleador histórico de Francia. Dos historias de vida y hambre resueltas con y por la pelota.

Como ocurre en el caso de Wright-Phillips, Lukaku también es hijo de un ex futbolista. Henry, ídolo en Arsenal, en MLS y en cualquier lugar donde se ha parado con la pelota.

“Desde que he estado trabajando de cerca con él, he mejorado mi juego al doble de lo que pensé podría hacerlo”, dijo Lukaku sobre la influencia de ‘Titi’ en su desempeño".

“Mi atención, mis habilidades, mis remates, mi rol frente al arco, mis acciones, dónde tengo que estar en el campo, marcar goles de la nada”, describió el belga sobre su mejoría. “Le debo mucho”, cerró.

Mientras 'BWP' rompió los records apoyado en su hambre por ser él mismo y con la tutoría de Henry, Lukaku deslumbró al mundo en Rusia recientemente con su participación en uno de los goles más importantes de Bélgica.

El delantero no tocó la pelota, pero sus movimientos abrieron dos espacios fundamentales para la definición de la llave en el último minuto ante Japón. “Estoy parado con la leyenda, en carne viva, y él me dice todo acerca de cómo correr a los espacios como él solía hacerlo”, había dicho Lukaku en su artículo.

'BWP' vio en vivo con su padre y hermano todo el fútbol que pudo, de ese se alimentó y con ese creció. Lukaku y Henry no llegaron por rutas diferentes. “Thierry Henry puede ser el único tipo en el mundo que ve más fútbol que yo”, remató Lukaku.

‘Titi’ se fue del fútbol siendo goleador en MLS, terminó de moldear a un delantero en New York Red Bulls y ahora que se unió a Roberto Martínez en el cuerpo técnico de la selección de Bélgica, le dio también brillo al diamante que siempre ha sido Romelu Lukaku.