El uruguayo Octavio Rivero llegó pisando fuerte a la MLS. Cinco goles en sus primeros seis partidos con los Vancouver Whitecaps abrieron el grifo de las expectativas, que el delantero no pudo colmar en el resto del año.
Un autocrítico Octavio Rivero y una primera año "decepcionante" con los Whitecaps
El delantero uruguayo se cuestionó por su poca eficacia ofensiva, tras un gran comienzo en Vancouver.
Marcó apenas cinco goles en los siguientes 28 juegos con los Caps, que se despidieron en las semifinales de la Conferencia del Oeste de los 2015 Audi MLS Cup Playoffs sin poder anotar goles.
"Personalmente no pienso que logré lo que esperaba", dijo un honesto Rivero. "Pienso que yo soy mi primer crítico y sí... creo en trabajar más el año que viene, trabajar juntos con el equipo con el objetivo de hacerlo mejor tanto como equipo como individualmente el próximo año", aseguró el delantero uruguayo.
La semana de entrenamientos sin partidos en el horizonte y el tiempo para desconectarse de la competencia no hizo cambiar el parecer del autocrítico charrúa, que la misma noche en que la temporada era historia, publicó un tweet disculpándose con los hinchas de los Whitecaps.
A pesar de la frustración del uruguayo, no todo fue tan malo para él. El técnico galés Carl Robinson destacó el aporte de Rivero durante su primer año en la MLS.
"Si lo miras bien, Octavio tiene apenas 23 años y ya ha marcado goles en tres ligas diferentes. ¿Podría haber marcado más goles? Sin dudas", valoró "Robo" Robinson.
"Octavio se genera sus espacios, provoca sus tiros, creo que fue de los tres o cuatro jugadores con más tiros al arco, ahora mí trabajo es ayudarlo a que esos tiros puedan ser goles", agregó el DT.
Usualmente Robinson para una formación 4-3-2-1, con Rivero como punta de lanza, pero ese no parece ser el problema ya que los Whitecaps funcionaron bien como equipo.
"Es importante jugar en equipo. En Uruguay y en Chile me tocó jugar como único delantero y, si todo el equipo se acostumbra a jugar en conjunto hacia adelante, va a estar bien. Es importante para el delantero, pero también para un mediocampista o para un defensor", opinó el delantero uruguayo, que durante 2015 disparó a meta 101 veces, pero sólo el 40% de esos tiros fueron bien dirigidos.
El desafío para 2016 es consolidar todas las mejoras del equipo, que fue muy firme en la defensa pero le costó ser contundente en ataque. "Habíamos fijado marcar un 25% más de goles que en 2014, cuando marcamos 43. No lo logramos y tendremos que seguir trabajando en eso", aceptó Robinson, cuyo equipo consiguió apenas dos goles más que el año anterior.
Además de Rivero, el circuito ofensivo con Kekuta Manneh, Cristian Techera, Pedro Morales tendrá que estar más fino cuando ingrese al área.