Durante casi una década, Wayne Rooney y Nani se combinaron en Manchester United para seguir llenando las vitrinas del club con trofeos bajo las órdenes de Sir Alex Ferguson. Se convirtieron en dos titanes del legendario club de Inglaterra.
Wayne Rooney le gana la partida al Orlando City de Nani con un golazo
El estelar británico del DC United marcó y puso un pase de gol, y con ello sentenció el esperado encuentro ante su ex compañero del Manchester United.
Los buenos amigos se volvieron a ver las caras en la MLS, pero en bandos contrarios. Rooney defendiendo la causa del DC United, y Nani la de Orlando City.
El delantero británico término destinando el triunfo del DC United por 2-1 ante los Leones de la Florida con un pase para gol y un golazo que no pudieron ser revertidos a pesar de que Nani encabezó un intento de remontada.
Rooney hizo gala de su pegada con pierna diestra en un par de cobros de tiro libre en la primera media hora de partido. Suficiente para poner un envenenado servicio que Steven Birnbaum mandó guardar.
Y para luego marcar su golazo que se clavó en la horquilla a segundo poste desde un ángulo muy complicado. Aunque, también hay que resaltar la complicidad del arquero de Orlando, quien se techó solito.
Old friends. #ORLvDC pic.twitter.com/MPWNeMHDDE
— Orlando City SC (@OrlandoCitySC) March 31, 2019
Nani estuvo bastante participativo en la zona ofensiva de los locales, causando estragos en la defensa de los capitalinos, que no había recibido gol en la campaña. Pero el portugués se perdió una inmejorable ocasión para emparejar los cartones cuando caían por un solo gol.
Si bien Nani falló en un momento clave, Júnior Moreno igualmente lo hizo para las Águilas Negras. Tuvo para el 3-0 con un ‘bombón’ que le regaló Rooney, para liquidar, pero en cambio dejó con vida a los felinos.
El luso lo siguió intentando para Orlando, pero sin suerte y sin una jugada tan clara como la que se comió inicialmente. Pudo enmendar un poco generando la jugada del descuento que firmó Dom Dwyer de cabeza.
El mismo Dwyer tuvo para empatar a dos tantos en un par de ocasiones, pero entre la falta de puntería y el portero Bill Hamid, se frustró el grito de gol.