Barcelona recibe al Sevilla este sábado con el objetivo de acabar con la racha de cuatro partidos sin ganar y, de paso, recuperar el liderato de La Liga de España que el conjunto andaluz le arrebató la pasada jornada.Los azulgranas tienen como principal hándicap para lograrlo las bajas por lesión que padecen en el eje de la zaga y que dejan a Piqué y Lenglet como únicos centrales sanos de la primera plantilla.Umtiti sigue pendiente de saber si tendrá que pasar por el quirófano para solucionar los problemas que sufre en el cartílago de la rodilla izquierda y Vermaelen se lesionó el bíceps femoral de la pierna derecha en el Bélgica-Suiza y estará seis semanas de baja.Para paliar ambas ausencias, el técnico del Barcelona, Ernesto Valverde, ha llamado esta semana para entrenar con el primer equipo al central del filial Juan Brandáriz 'Chumi', aunque habrá que esperar al entrenamiento de esta tarde para saber si finalmente entra en la convocatoria.El preparador extremeño acostumbra a hacer rotaciones tras el parón de selecciones, pero la reconquista del liderato parece un objetivo demasiado goloso para dosificar esfuerzos, aunque al equipo se le venga encima un duro calendario la próxima semana, cuando también recibirá a Inter de Milán, Real Madrid y Betis en el Camp Nou.Lo que está claro es que si Piqué y Lenglet son fijos en el centro de la defensa, Messi y Luis Suárez también lo serán en la punta de ataque. Argentino y uruguayo están descansados tras renunciar a participar con sus respectivas selecciones y quedarse entrenando en Barcelona.Suárez, además, aparentemente parece estar recuperado de sus molestias en la rodilla tras dos semanas de trabajo específico. Coutinho o Dembélé deberían completar el tridente ofensivo.En el centro del campo, Sergio Busquets y Rakitic parecen fijos y Arthur podría sumar su tercera titularidad consecutiva ante el equipo de Pablo Machín.El Sevilla, líder con 16 puntos, uno más que el Barcelona y el Atlético de Madrid, afronta una de las salidas más complicadas de la temporada con la confianza que le otorgan sus cuatro triunfos ligueros seguidos y su actual puesto de privilegio cuando van ocho jornadas de Liga, algo que no conseguía desde 1945, cuando ganó su única Liga hasta ahora.El buen momento de los sevillistas, con 14 goles marcados en las últimas cuatro jornadas y pese al borrón de su derrota hace dos semanas en la Liga Europa ante el Krasnodar (2-1) en Rusia, ha puesto, además, en evidencia el pésimo arranque de Liga de los llamados a priori a liderar la tabla: Barça, Real Madrid o Atlético.Aún así, el técnico de los hispalenses, Pablo Machín, ha dejado claro que el liderato de su equipo no es anecdótico y que no van a Barcelona de paseo o pensando de antemano en que el Camp Nou es inexpugnable, sino con la máxima motivación, a plantear batalla y, sobre todo, a competir y a intentar aprovechar sus bazas.Aunque el estadio no es propicio para el Sevilla, que en Liga lleva dieciséis años sin ganar en él, desde diciembre de 2002, y desde entonces sólo arrancó dos empates y encajó trece derrotas, los de Machín asumen el reto de salir a ganar y ponérselo difícil al Barça, apoyado en las buenas sensaciones dejadas en los últimos partidos.Los sevillistas son conscientes de que deberán superar grandes obstáculos, empezando por saber frenar al que Machín califica como el "mejor jugador del mundo", el argentino Leo Messi, para lo que será fundamental estar casi perfectos en defensa y aprovechar las ocasiones que generen y el gran estado de forma de jugadores clave como Jesús Navas, los argentinos Banega y Franco Vázquez o el galo Ben Yedder y el luso André Silva.Los dos últimos, desde que el soriano cambió su sistema para alinearlos juntos, están especialmente inspirados y entre ambos llevan 16 tantos (9 Wissam Ben Yedder, 5 en Liga; y 7 el portugués, todos en el torneo liguero) y han marcado 11 de los 20 anotados en los últimos seis partidos.Se prevé que el Sevilla repita el once que tan buenos resultados le está dando, a pesar de haber recuperado al central argentino Gabriel Mercado, uno de los lesionados que ha tenido en las últimas semanas, junto al lateral Escudero y los medios franceses Amadou y Gonalons, y que han obligado al equipo a hacer un sobresfuerzo.