El jugador del United se ha perdido los tres últimos encuentros después de que las denuncias salieran a la luz y ha permanecido en Brasil hasta que esta semana ha vuelto a Inglaterra para declarar ante la policía del Gran Mánchester.
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Tras la declaración, Antony, al que no se ha impuesto ninguna restricción, podrá volver a los entrenamientos y los partidos con el United, tal y como confirmó el club.
"El Manchester United ha decidido que volverá a los entrenamientos en Carrington y que estará disponible para jugar, mientras las pesquisas policiales continúan".
Antony, que no fue suspendido de empleo y sueldo desde que fue apartado del grupo, negó todas las denuncias y habría dado pruebas de su inocencia a la policía.
Su expareja, Gabriela Cavallin, le acusó de abuso, mientras que otras dos mujeres, Rayssa de Freitas e Ingrid Lana, le acusaron de agresión.
Cavallin detalló en un medio brasileño que Antony le golpeó con la cabeza, provocando un corte que necesitó de intervención médica y le dio un puñetazo en el pecho, mientras que Lana aseguró que la empujó contra una pared en octubre de 2022.
Antony no estará presente en el entrenamiento de este viernes con el United y tampoco estará disponible para enfrentarse al Crystal Palace este fin de semana.
