Un golazo nivel Champions League que tuvo un final de media tabla, una maestría en medio de la neblina, otra vez Raúl Jiménez y los Wolves, tan cerca de la gloria y, al mismo tiempo, tan cerca de la desilusión, tan al alcance y tan lejano como el sueño europeo en la Premier League.
Golazo de Raúl Jiménez, insuficiente para los Wolves
El mexicano contribuyó otra vez pero el Burnley igualó en la compensación en la Premier League.
El Wolverhampton lo ganaba con un golazo del mexicano, pero el Burnley lo empató en la compensación para el 1-1 final que prácticamente priva de cualquier chance de Champions League a la escuadra de Molineux.
Los Wolves hicieron méritos suficientes incluso para ir al descanso con goleada a favor, pero Diogo Jota no decidió bien en al menos dos ocasiones y Adama Traoré fue más impaciente de lo habitual, sin tomar en cuenta que Raúl tuvo dos chances que Pope mató a final de cuentas.
Para el segundo tiempo, el dominio, la posesión y las llegadas se mantenían para el bando visitante en el Estadio Turf Moor, y todo explotó a los 76' cuando Jiménez impactó de volea un esférico desde los linderos del área para anotar el gol que acercaba en serio al Wolverhampton a esa ansiada cuarta plaza de la Premier League, la que da boleto a Champions League.
El técnico Nuno Espirito Santo sacó del campo al mexicano, un movimiento normal del portugués cuando siente que los tres puntos están en la bolsa, pero la fatídica compensación frenó en seco los sueños del lusitano y de toda la visita. Después de que el VAR confirmara una mano, llegó un penal para los locales.
Sí, Burnley lo igualó vía Chris Wood desde los once pasos en una cachetada que prácticamente noquea a los Wolves en su lucha por alcanzar lugar en el certamen magno de Europa. Con 56 puntos, el Wolverhampton está virtualmente fuera de la Champions y batallará mucho también para conseguir chance de jugar la Europa League.