La votación, que salió favorable por 19 a 1 para mantener esta tecnología, se llevó a cabo por iniciativa del Wolverhampton, que criticó al VAR por sus errores, por restar emoción al juego, por aumentar el tiempo de los partidos y por las interrupciones que produce, además de por la falta de decisión que transmite a los árbitros.
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El único club que votó a favor de su eliminación fue el Wolves, sin embargo, la Premier League sí confirmó que se llevarán a cabo mejoras para que el VAR se utilice mejor en la competición.
Entre ellas se incluye "mantener un alto estándar para las intervenciones, que suponga una mejor regularidad y menos interrupciones en el transcurso de los partidos", reducir el tiempo de las decisiones del VAR, gracias en parte a la introducción del fuera de juego semiautomático que ya se utiliza en competiciones UEFA, mejorar la experiencia del aficionado con anuncios en el estadio por parte del árbitro tras una decisión y, cuando sea posible, repetición de la jugada en las pantallas.
También se trabajará con el PGMOL, colegio de árbitros de la Premier, para mejorar los cursos de preparación sobre el VAR, enfatizando en la velocidad del proceso, siempre y cuando se mantenga la precisión.
Además, se pretende realizar campañas con los aficionados para aclarar el papel del VAR y también aumentar la transparencia y comunicación de lo que ocurre entre la sala VAR y el árbitro, mediante su reproducción en programas de televisión.
Según datos de la Premier League, la eliminación del VAR provocaría más de 100 errores por temporada, al tiempo que aseguró que la tecnología, la campaña pasada, solo cometió cinco fallos, lo que supone una mejoría respecto al curso 2022-2023, cuando se realizaron 11 intervenciones incorrectas del VAR.
