Unai Emery ya lo entrenó como técnico del Sevilla y se arrepintió de no haberlo realizado. Antes del juego de febrero de 2016 ante Barcelona, de la Liga española, practicó con una barrera en la línea de gol, en lugar de la distancia de 9.15 metros, para frenar la efectividad de Lionel Messi en los tiros libres.El día del partido Unai decidió no utilizar esa defensa y el argentino se despachó con un golazo de falta directa. El Barcelona se impuso 2-1 con remontada en Camp Nou.Inmediatamente Emery hizo público su plan que no llevó a cabo y se dijo arrepentido. Recordó que en 2015 Messi les anotó dos veces de tiro libre en la Supercopa de Europa."Si lo llegamos a hacer podrían haber pasado dos cosas: que hubiéramos quedado como los inventores de una nueva parte del futbol o que nos dijeran que somos los más tontos. Y no lo hicimos. Esa decisión la tomé yo. Dije 'vamos a dejarlo', y nos metió gol", dijo en aquella ocasión.Ahora, como técnico del París Saint Germain, rival de los catalanes en los octavos de final de la Champions League, vuelve a tocar el tema pero descarta, desde un inicio, poner la barrera en la línea de gol."Dos partidos no son iguales. Jugadores que han hecho cosas excepcionales querrán repetirlas e intentaremos contrarrestarlos pero no vamos a hacer cambios drásticos sobre eso", se sinceró.Este martes el mundo del futbol estará pendiente de alguna oportunidad de tiro libre que tenga Messi en el Parque de los Príncipes. Quién sabe, Emery podría arrepentirse y seríamos testigos de una inusual barrera colocada en la línea de gol.