‘Ruso’ Zamogilny | Un reto para todos

Las autoridades alemanas ya autorizaron el regreso del futbol profesional a partir del 15 de mayo y en España los jugadores de LaLiga se presentaron a la realización de pruebas de COVID-19, el primer paso para que se concrete el regreso a los entrenamientos.

Así, los países de Europa comienzan a ver la luz después de que, pareciera, ya pasaron los momentos más álgidos de esta pandemia que paralizó al mundo. Está claro que nada será como antes, por lo menos durante un tiempo. La nueva normalidad nos dará partidos a puerta cerrada y con un protocolo sanitario muy estricto para todos los involucrados.

En México, según las autoridades sanitarias, estamos enfrentando la semana más difícil en cuanto a transmisión del virus y por ahora la reactivación de la Liga MX se ve demasiado lejana. Aquí llevamos aproximadamente 40 días de parón, más lo que se agregue.

En este escenario, cuando digo que nada será como antes, también hablo de las inercias que llevaban los equipos en cada una de sus ligas, que con el parón futbolístico a algunos podría afectar negativamente y para muchos otros equipos será la posibilidad de escribir una nueva historia.

Desde el punto de vista profesional considero que éste ha sido un reto sumamente difícil para todos los involucrados en el mundo del futbol, pero sobre todo para cada uno de los cuerpos técnicos que han tenido que trabajar a distancia, proponiendo trabajos y llevándolos a cabo a través de aplicaciones que hoy en día pueden facilitar un poco la comunicación, pero que en definitiva nunca será lo mismo que compartir la cancha o el gimnasio.

Explotar la vía digital es la única opción para los entrenadores y todos los equipos han tenido que adaptarse en mayor o menor medida.

También para los futbolistas confinados ha sido retador, puesto que es su obligación mantenerse activos, sosteniendo la mejor forma física posible pero a la vez navegando en la absoluta incertidumbre sobre lo que viene.

Adaptarse o morir. La coyuntura exige que los futbolistas se fortalezcan mentalmente y se autoexijan para sacar adelante con éxito cada una de las sesiones de entrenamiento. La disciplina y la mentalidad siempre han sido importantes, pero hoy más que nunca tendrán un peso esencial en el desempeño de los futbolistas una vez que se reactive el futbol.

Aquellos que hayan trabajado mejor en estos días de confinamiento son los que resentirán menos el regreso al ritmo de juego, evitarán lesiones musculares y podrán sacar ventaja en las primeras semanas luego de la reactivación.

Por ahora, mientras esperamos que el futbol nacional se reactive, estaremos a la expectativa sobre como se va desarrollando la vuelta en el viejo continente y una vez que se mueva la pelotita, sabremos cuál es el nivel en el que llegan las máximas figuras.

¡Un abrazo de goool para todos!