Torreón, MÉXICO.- Santos tiene un mal crónico que le pega directo en su confianza colectiva y pese a una multitud de chances, no hubo manera de anotar a un Atlas que pegó una vez y fue suficiente.
Santos no supo definir y Atlas le pegó en casa al ganarle 1-0
Pese a llevar la batuta a lo largo de los 90 minutos, los de La Comarca fallaron todo lo que tuvieron y los Rojinegros, con un par de chances y un gol de Bryan Garnica, les vencieron.
Y es que los Guerreros no hicieron pesar su estadio ni su fútbol. Lo mismo en el primer minuto del juego que en el último.
Julio Furch ya fallaba una clara al iniciar el encuentro y el balón se le hacía esquivo a solo un metro de la línea de gol.
El concierto de fallas ofensivas fue largo e inexplicable. Si hasta los rebotes peligrosos le salieron a las manos de Oscar Ustari. O Jaine Barreriro sacaba también a centímetros del gol.
En esa lógica, Néstor Araujo puso en órbita un balón que debió al menos salir arco con cierto peligro y toda decisión frente a la portería de los Rojinegros era corta o larga, pero nunca del tamaño indicado.
La confianza está desbordada y fuera de lugar. Con cada nueva falla se fue haciendo un monstruo multiforme imposible de vencer.
No importando si era Furch, Tavares, Rodríguez o Dávila el virus es el mismo y atacó a todos por igual sin misericordia.
Atlas aguantó el vendaval, haciéndose fuerte con los yerros del rival y aguardando la suya que llegó a los 52’.
El ingreso de Matías Alustiza le dio fuerza a la ofensiva del Atlas de la que no se había tenido apenas noticias.
‘El Chavo’ combinó con Milton Caraglio con un largo servicio y el argentino le bajó el esférico a Bryan Garnica que empujo el esférico a las redes. Castigo y recompensa excesiva dependiendo del bando desde que se miró el juego.
Esos fueron los mejores minutos de los Rojinegros en el partido y si Santos tenía confusión ofensiva, se extendió entonces a la defensiva.
Jonathan Orozco debió enseñar sus grandes condiciones en el arco en un par de tiros: uno de Caraglio y otro de Alustiza.
Santos nunca aclaró su juego ni su mente y estuvo, lo que quedó del partido, siempre cerca del arco de Oscar Ustari, pero nunca de empatar.
Con este resultado, Atlas llegó a 16 unidades y se coloca muy cerca de la zona de Liguilla, mientras Santos se quedó con nueve puntos sumido entre los peores del torneo.