SAN SALVADOR, El Salvador.- Los 18 jugadores que se declararon en huelga en octubre pasado por discrepancias con la Federación Salvadoreña de Fútbol (FESFUT), a la que le reclamaban mejores premios y condiciones laborales, tendrán que pedir disculpas públicas, informó hoy la institución.
Seleccionados salvadoreños tendrán que pedir disculpas por irse a huelga
Los 18 jugadores que se declararon en huelga en octubre pasado por discrepancias con la Federación Salvadoreña de Fútbol tendrán que pedir disculpas públicas como sanción
El vicepresidente de la FESFUT, Hugo Carrillo, dijo que el Comité Disciplinario de la institución decidió, luego de analizar los expedientes de cada jugador, imponer una sanción de disculpas públicas para los "huelguistas".
"Deben de disculparse con la afición, con el cuerpo técnico y con el Comité Ejecutivo de esta federación", sostuvo el dirigente.
Los jugadores sancionados son Henry Hernández, Jonathan Barrios, Milton Molina, Narciso Orella y David Rugamas, del equipo salvadoreño Isidro Metapán.
A ellos se suman Luis Contreras, Xavier García, Alexander Mendoza, Jonathan Jiménez, José Ángel Peña y Rafael Burgos, todos de la Asociación de Fútbolistas Santanecos; Oscar Arroyo y Juan Carlos Portillo, de Alianza; y Marlon Cornejo, Juan Barahona, Gersón Mayen, Henry Romero e Ibsen Castro, del Santa Tecla.
Carrillo explicó que dentro de la lista no se encuentran los jugadores legionarios Alexander Larín, Darwin Cerén y Arturo Álvarez quienes participaron en el "paro", pero que estos también deben de acatar lo dispuesto por la FESFUT.
Los sancionados tienen un plazo de ocho días para cumplir lo impuesto, agregó el vicepresidente.
El seleccionador Ramón Maradiaga dijo que las medidas "son justas" y que los jugadores deben "acatarlas" para "dar por concluida la situación".
"Esperamos que este episodio pase al olvido y que a partir del próximo año podamos trabajar de la mejor manera posible", concluyó.
Los jugadores que fueron convocados por el entrenador hondureño Maradiaga se declararon en huelga el 25 de octubre para exigir de los directivos de la federación salvadoreña mejores premios económicos y condiciones de trabajo.
La huelga, que duró tres días, antecedió al partido de eliminatorias del Mundial de Rusia contra México.
El Salvador cayó goleado por 3-0 el 13 de noviembre en Ciudad de México.