Ricardo “El Tuca” Ferretti ya expresó públicamente su deseo de que todo el papeleo quede listo para que Luis Advíncula aterrice en el Volcán de San Nicolás de los Garza. Este peruano de 26 años es justo lo que la Liga MX necesita en esa posición.
Esta pantera negra es el lateral derecho que viene a romper la Liga MX
Como si fuera graduado de la escuela de laterales brasileros, el peruano se echó a su país al hombro en la Copa América de Chile 2015.
Y es que, de un tiempo acá, en los clubes mexicanos escasean esos laterales que tocan línea de fondo hasta más no poder para lanzar servicios al corazón del área. Con jugadores como Jorge Torres-Nilo o el paraguayo Bruno Valdez como ejemplos, los laterales de la Liga MX se estaban volviendo más defensores que ofensores.
Busquen en YouTube el resumen del Chile 2-1 Perú de la Copa América 2015. Los peruanos se habían quedado con uno menos por expulsión al zaguero Carlos Zambrano y el técnico Ricardo “El Tigre” Gareca tuvo que quedarse con un solo delantero, Paolo Guerrero, para no desbalancear al equipo.
Guerrero hubiera parecido un náufrago en una isla rodeada por mares de futbolistas chilenos de no haber sido por Advíncula. Con velocidad, fuelle y técnica de golpeo, se hartó de llegar a línea de córner para hacerle llegar balones en las narices de Claudio Bravo. Así llegó el empate transitorio peruano.
Luis Advíncula entonces jugaba en Portugal y tomó la equivocada decisión de fichar por el Bursaspor de Turquía (su carta aún les pertenece). Sin hablar el idioma turco ni adaptarse completamente, el año pasado debió jugarlo prestado en el Newell’s Old Boys de Rosario, pero el club “leproso” ha sufrido muchos altibajos y su fútbol no ha podido volver a ser el mismo.
Si “El Tuca” logra sacarle el rendimiento que “El Tigre” le sacó en esa Copa América sobre suelo chileno, no hay duda que Advíncula será un espectáculo para los fanáticos de la Liga MX. Y el más agradecido de todos con su fichaje no le dirá “MUCHAS GRACIAS”, sino “MERCI BEAUCOUP”.