El pasado martes el árbitro asistente Octavian Sovre se acercó a Erling Haaland para que le firmara sus tarjetas, acción que le valió sinfín de críticas, pero que este jueves se ha conocido la verdadera razón del por qué lo hizo.
Árbitro dona tarjetas autografiadas por Haaland para subasta a beneficio del autismo
Octavian Sovre fue criticado por esa acción sin saber que sus intenciones eran por una buena causa.
El rumano se acercó, luego de la victoria del Manchester City al Borussia Dortmund en la Champions League, al delantero noruego con un objetivo solidario sus autógrafos para que esas tarjetas sean subastadas y conseguir dinero en la lucha contra el autismo en su país.
Esto fue confirmado por Simona Zlibut, quien se encarga de supervidsar el centro centro SOS Autism Bihor al cual Octavian Sovre donó las tarjetas con los autógrafos de Haaland en las últimas horas, en palabras a la agencia Reuters.
"Las tarjetas firmadas en rojo y amarillo que mi compañero de jardín de niños Octavian donó a nuestro centro SOS Autism Bihor se utilizarán para una causa noble... los padres, dependemos de las donaciones, subastamos faldas, fotografías, autógrafos, lo que sea que obtengamos, para compensar el enorme déficit".
La hija de 21 años de Zlibut es autista y dijo que el centro depende de ese tipo de donaciones, por lo que las tarjetas autografiadas por Haaland estarán disponibles a finales del mes de abrir por la red social de Facebook.
"No puedo describir cuánto nos ha ayudado Octavian durante muchos años. Si llamara y pidiera dinero, casi nadie confiaría en donar, pero cuando se trata de artículos, camisetas, pinturas, autógrafos y fotos que se subastan, la gente puja. Usamos el dinero que llega para tratamientos para personas con autismo", dijo también a la Gazeta Sporturilor, medio local.
Zlibut agregó que el dinero recaudado por la subasta es para ayudar a la terapia de 30 autistas menores de 47 años en el centro de la ciudad occidental de Oradea, en la frontera con Hungría y también que exfutbolistas como Gheorghe Hagi y el portero Helmuth Duckadam, que estuvo en el equipo Steaua Bucarest que ganó la Copa de Europa en 1986, habían ayudado al centro en el pasado.