Partido cómodo para el Liverpool que se adelantó muy pronto en el encuentro. El cuadro inglés sufrió en los contragolpes ante el Genk pero dominó a placer el esférico durante todo el partido y venció gracias al doblete de Alex Oxlade-Chamberlain y un tanto de Sadio Mané.
Liverpool vence con comodidad en Bélgica
Oxlade-Chamberlain brilló con dos goles para derrotar al Genk.
Apenas a los 2’ de partido el Liverpool ya encontró hueco en la porosa defensa del Genk. El conjunto inglés profundizó por el sector derecho, Fabinho conectó con Oxlade-Chamberlain en los linderos del área y con la pierna izquierda firmó un potente disparo en el que Coucke no pudo ni lanzarse.
Lejos de decaer, el conjunto belga salió a la carga tras verse en inferioridad en el marcador. Samatta en un contragolpe definió ligeramente desvaído al 4’ y el tanzano lo volvió a intentar al 8’ tras superar a van Dijk en carrera pero se estrelló con Alisson Becker, en su primer partido como titular esta campaña en Champions League.
El Genk le dio a Klopp una sopa de su propio chocolate atacando al contragolpe y al 19’ Ito entró solo pero se resbaló cuando pisaba el área.
El joven Gaetan Coucke se hizo presente con una gran atajada a Sadio Mané en un mano a mano al 25’ que fue posible gracias a una increíble pared de Roberto Firmino que asistió de rabona al senegalés. Siempre tan fino el brasileño.
Al 27’ el Genk anotó el gol del empate gracias a un remate de Samatta a centro de Ito, los dos más activos en la primera parte, pero hubo fuera de juego del japonés al recibir el balón. El VAR confirmó la designación del árbitro y el tanto no subió al marcador.
Al 30’ Mohamed Salah rozó el gol con un tiro libre pero su envío se fue ligeramente por arriba. El Liverpool dominó las acciones gran parte de la primera mitad, tuvo mucho el balón en un ritmo lento y sufrió, si acaso, con las transiciones veloces del Genk, la última en el 40’ cuando Samatta volvió a irrumpir y se quedó a centímetros de conectar un centro potente desde el sector derecho.
La última ocasión de una primera parte con emociones y dominada por el Liverpool fue un bombazo lejano de Fabinho que detuvo, sin problemas, el joven Coucke.
La segunda mitad inició igual y nada ocurrió hasta que Oxlade-Chamberlain maravilló con un increíble gol para aumentar la renta del Liverpool. El volante de 26 años la firmó desde fuera del área, de ‘tres dedos’ y de ‘globito’. Una definición increíble.
Tras el gol, el conjunto belga decayó anímicamente a diferencia de la primera anotación y eso permitió que el Liverpool hilara series de hasta 10 o 15 pases de forma continua. Una serie de cambios también bajaron el ritmo del encuentro y Firmino falló una ocasión y pidió penalti pero no hubo nada sobre el atacante carioca al 69’.
Al 75’ el Liverpool mostró que también sabe contragolpear; Mané recibió un balón filtrado, enfrentó a Coucke y lo superó con una gran definición de ‘globito’.
Al 85’ el Genk intentó recortar distancias y Ndongala se lanzó una chilena que no encontró dirección de portería. Finalmente, Salah anotó un golazo al 88’ para consumar la goleada pero el Genk respondió inmediatamente y Odey, que había ingresado de cambio, anotó el gol de la honra al 89’.
Con la victoria el Liverpool obtiene el segundo lugar del Grupo E con seis unidades, mientras que el Napoli es líder con siete puntos. Salzburg suma tres puntos pese a ser el máximo goleador del Grupo con 11 anotaciones y el Genk se sitúa con un punto en la última posición.