El Mónaco fue incapaz de salir de Estambul con los tres puntos para reactivar sus opciones en la Liga de Campeones y consiguió un empate contra el Besiktas (1-1), que tendrá que sellar su clasificación para los octavos de final en las dos jornadas restantes.
Mónaco y Besiktas negocian empate pensando en octavos de final
El cuadro francés logró salir con puntos de la cancha de los turcos y están a un paso de asegurar su clasificación a la siguiente ronda.
El cuadro otomano, que afrontó el duelo ante el Mónaco con pleno de triunfos, no pudo prolongar su racha. La victoria hubiera dado al Besiktas el pase matemático a las eliminatorias. El empate aplaza su objetivo al no ser que el Leipzig ante en Oporto, en el otro duelo del Grupo G.
Y eso que el equipo turco buscó el éxito desde el principio. Salió en tromba y tuvo una posesión mayor que el Mónaco, al que sólo le servía la victoria para irrumpir de nuevo en la pelea. Ahora, con la igualada, aún cuenta con opciones matemáticas. Pero ya no depende de sus propios marcadores.
El conjunto de Senol Gunes asumió el dominio pero poco a poco las ocasiones eran de su rival. Advirtió en el 37, cuando un centro de Fabinho fue rematado por Rony Lopes. El meta español Fabricio desbarató la ocasión.
No desperdició la siguiente oportunidad el cuadro visitante. Joao Moutinho robó la pelota en un intento de salida del Mónaco. Lo envió a Rony Lopes que, desde fuera del área, ejecutó un disparo raso y ajustado al palo que alcanzó la red. Fue en el tiempo añadido de la primera parte.
El Besiktas arrancó la segunda mitad con la firme búsqueda del empate. Encerró al Mónaco, que intentó aguantar el chaparrón.
Ricardo Quaresma, el jugador más peligroso del cuadro turco durante gran parte del tiempo, recibió el balón dentro del área, en posición de tiro. Sin embargo, esperó a Jorge, que le barrió sin contemplaciones. Fue penalti.
Cenk Tosun no marró desde los once metros. Fue su cuarto gol en cuatro partidos de la liga de Campeones. Pudo ponerse por delante el conjunto turco, pero el tiro de Quaresma tras un robo del Ryan Babel, con el meta descolocado, se marchó alto.
Apretó en el tramo final el Mónaco en busca del triunfo. Echó de menos el equipo de Leonardo Jardim al colombiano Radamel Falcao, todavía lesionado. Gary Medel sacó bajo palos, con Fabricio batido, un remate de cabeza de Andrea Raggi que parecía gol.