El formato emergente que tendrá la definición de la UEFA Champions League abre la oportunidad para coronar un nuevo campeón el 23 de agosto en Lisboa.
Raúl Méndez | Por la Chaaaaampions
Una 'liguilla' a partido único con circunstancias extraordinarias posee retos a superar.
Jugar una Liguilla a partido único tras la temporada recortada, el ritmo desigual entre los participantes y el riesgo de perder jugadores a falta de contrato son los factores a superar.
Tal vez ha llegado el momento para que Atlético de Madrid por fin pueda levantar la Orejona en el estadio Da Luz, el mismo donde se quedó muy cerca de conseguirlo de no ser por el ya célebre “minuto 90 y Ramos” en 2014.
Los colchoneros encabezan la lista de rebeldes que amenazan con romper la “normalidad” de los campeones hegemónicos.
Desde el 2000, Porto y Chelsea han sido los únicos equipos que se estrenaron como campeones de la competición.
Contando al Atlético son siete los clubes que reclaman la inmortalidad europea en una edición que aumenta las posibilidades de lograrlo bajo este sistema de competencia.
Habrá prórroga o penales, pero ya no se especulará con el gol de visitante aunque tome sus reservas porque siguen en competencia entrenadores especialistas en cuidar sus ventajas con el orden defensivo como Diego Simeone o Genaro Gattuso.
Tomemos como referencia las Copas del Mundo. A partir de las Octavos de Final la tendencia es jugar con planteamientos precavidos porque es mayor el temor de perder que el deseo de ganar.
También el ritmo será determinante. Los clubes italianos, españoles e ingleses terminarán sus torneos de liga e inmediatamente se ligarán a la Champions.
Los alemanes culminan la Bundesliga en junio y permanecerán inactivos hasta agosto, salvo Bayern Munich que jugará la final de la Pokal el 4 de julio antes de la vuelta contra Chelsea de los Octavos el 7 u 8 de agosto.
Peor escenario para RB Leipzig que ha vendido a su estrella, el goleador Timo Werner al Chelsea, así que cuando se reanude la Champions tendrá que reportar con su nuevo club antes que finalice la temporada 2019-2020.
El caso Werner será el primero que veamos en los meses previos a la reanudación de la Champions.
En cuanto al ritmo, los franceses redujeron sus opciones cuando el gobierno canceló la Ligue 1. Paris Saint Germain aprovechará las finales de Copa y Copa de la Liga en la última semana de julio como sus únicos duelos de preparación. En la misma línea se encuentra Olympique de Lyon que disputará con PSG el duelo por la Copa de la Liga.
La experiencia de jugar esta clase partidos recae en Real Madrid, Barcelona, Bayern y Juventus. Los únicos que han ganado en más de una ocasión el torneo. Sus entrenadores disponen de un plantel generoso en cantidad y calidad para explotar los cinco cambios.
Si hablamos de estrategas Zinedine Zidane y Pep Guardiola ya probaron la gloria europea. El francés busca ser el primero en llegar a cuatro mientras que el catalán tiene la premisa de hacerlo sin Lionel Messi en la que tal vez sea su última oportunidad al frente del City, si se ratifica la sanción de dos años sin Champions.
Hasta la próxima semana. Cuídense mucho, por favor.