Mar André Ter Stegen fue la figura indiscutible de un Barcelona gris q ue apenas logró el triunfo sobre Dinamo de Kiev, pero que de no ser por el alemán que evitó al menos tres goles, la historía habría pintado distinta. Messi y Piqué aseguraron la tercera victoria del equipo blaugrana en Champions League.
Un monumental Ter Stegen le salvó el triunfo a Barcelona
Lionel Messi y Gerard Pique marcaron los goles en un partido malo para los culés.
Todo estaba encaminado a que Barcelona goleara al Dinamo de Kiev y empezaba intenso con un penal a favor que Leo Messi cobró impecable al lado izquierdo del arquero para poner a su equipo al frente. Tercer tanto consecutivo desde los once pasos para el argentino en esta Champions League.
Son 150 partidos en competiciones UEFA para Leo Messi, 146 en Champions League, 121 goles marcados (118 en UCL). El dato curioso es que el 10 del Barcelona debutó ante el Shaktar Donetsk en Champions, dirigido por Lucescu, el hombre a quien enfrentó hoy contra el cuadro de la capital ucraniana.
Después del tanto vino una falla garrafal de Griezmann a menos de un metro de la portería, de ahí en más los culés se desmoronaron. Caminaban en la cancha, carecían de profundidad, no estaba a punto los dirigidos por Koeman, que empezaron a tener problemas que Ter Stegen resolvía de forma espectacular.
El segundo tiempo trajo dos llegadas a quemarropa en favor del Dinamo de Kiev, pero el portero alemán, que hoy volvió a jugar tras su operación de rodilla, desvió todo con el brazo, la pierna y manos. Un auténtico robot teutón ahogaba el grito de gol a su rival, una y otra vez.
Por fin vino una jugada que tuvo un tránsito de balón importante por ambos sectores. Por derecha inició la jugada con Dest y empezó a cambiar de frente con Messi, para acabar con Ansu Fati y un centro maravilloso que encontró el giro de cabeza perfecto de Piqué para el segundo gol, su tanto 15 en Champions League.
Después de eso, Ter Stegen volvió a ganar un mano a mano. Tanta fue la holgazanería de la defensa de Barcelona, dependiente de Marc André, que tuvo que suceder una desatención a pesar que el alemán desvió un tiro raso, Lenglet no atinó a marcar a Tsygankov y este marcó el descuento.