En Wembley se comió pizza y se tomó vino cuando terminó la Semifinal de la Euro 2020 entre España e Italia, pero hubo brigadeiro de postre, pues Jorginho marcó el penal que le dio el pase a Italia en busca de su segunda Eurocopa, la que no ganan desde 1968.
Italia en penales elimina a España y está en la Final de la Euro 2020
Desde los once pasos Morata, que había marcado el empate, falló y Jorginho le dio el pase a los 'azzurri'.
La primera sorpresa llegó desde el vestidor. No aparecía como titular Álvaro Morata, quien venía de menos a más en el torneo. Dani Olmo, Ferrán Torres y Mikel Oyarzabal se encargarían del ataque a fin de que los feroces defensas italianos no tuvieran referencias de marca.
El encuentro tuvo la tónica que se esperaba desde el inicio, muy peleado en medio campo. Ninguno de los dos equipos dejaba salir cómodo al otro. La presión era alta, los zagueros tenían delanteros respirándoles al cuello y se buscaban los trazos largos, sobre todo del lado español, para encontrar posesiones en campo rival.
El ajedrez táctico entre Luis Enrique y Roberto Mancini era digno de un episodio especial de Gambito de Dama, donde Beth Harmon no sería la protagonista.
¿La mejor opción de gol? El tiro de Olmo a unos centímetros del punto penal que provocó el reflejo más felino de Gianluigi Donnarumna. La zona azul de la grada en Wembley vio muy de cerca como la racha de 32 juegos sin derrota para el equipo de Mancini se ponía en jaque.
En contraste, el arquero Unai Simón fue el culpable de la más clara de Italia con una salida precipitada que le dio una doble opción de disparo a Chiesa y a Barella pero nunca se acomodaron para disparar a la desprotegida meta ibérica.
El reloj obligó a que en la parte complementaria se arriesgara un poco más. Italia se conoce, sabe como explotar mejor las fortalezas de sus jugadores y decidió ceder la posesión para desarrollar el juego que más le favorece y así, como agua de un arroyo, encontró su cauce en los espacios que España comenzaba a dejar.
De ese modo fue como en un contrataque liderado por Immobile, Federico Chiesa acompañó la jugada, recibió la pelota y en un movimiento muy al estilo de Isigne, Robben o Neymar, recortó al centro para sacar un disparo pegado al palo contrario del guardameta que solo pudo ver como su valla era vencida.
Gracias a Dios, a la ciencia, a la fuerza o simplemente a la vida que permitió al público hacerse presente en el estadio, pues el estruendo en Wembley fue como música, como escuchar a Andrea Bocelli en el Olímpico de Roma previo al juego que inauguró esta tan afable y palpitante Euro 2020.
Los cambios italianos y su famoso orden defensivo le impidieron a La Furia Roja encontrar su único usufructo del certamen, las asociaciones y pases verticales en los movimientos que sus laterales, interiores o extremos hacían al espacio, o, mejor dicho, recovecos, que ya no daba el equipo 'azzurro', salvo una desatención que no aprovechó Oyarzábal de manera increíble.
Pero este torneo ha sido el de los villanos inesperados como Kylian Mbappé y Mathis De Ligt, y los héroes impensados como Yann Sommer, Simmon Kjaer y ahora, el tan criticado Álvaro Morata, que desde el banquillo llegó, hizo una fabulosa pared corta con Olmo y envió la pelota a besar la red.
Los mejores hombres en ataque ya no estaban para los 'azzurri' y se notaba, España se acercó más al gol en el alargue, pero la parte física le jugó en contra a ambos cuadros que vieron a Federico Chiesa y Eric García salir cuando las piernas ya no les respondieron.
Hora de definir en los penales. Simón y Donnarumma, uno de ellos estaba destinado a convertirse en héroe.
PENALES
(ITA) Locatelli falló 0-0 y (ESP) Olmo falló 0-0
(ITA) Belotti anotó 1-0 (ESP) Gerard ano´tó 1-1
(ITA) Bonucci anotó 2-1 (ESP) Thiago anotó 2-2
(ITA) Bernardeschi anotó 3-2 (ESP) Morata falló 3-2
(ITA) Jorginho anotó 4-2
Y con el recorrido de los italianos en busca del abrazo más efusivo de la copa hasta el momento con Jorginho, el nacido en Brasil, llegaron las lágrimas en los rostros del equipo de Luis Enrique, las caras de desconsuelo y todas las emociones que hacen de este deporte, el más popular del mundo.