Los goles de visitante y una atajada clave de Gianluigi Donnarumma pusieron al Milan en los Octavos de Final de la Europa League, pues el Estrella Roja de Serbia logró llevarlos al límite y el marcador global fue de 3-3, en una serie en la que los italianos sufrieron al encontrarse con un rival valiente que no dejó de luchar hasta el silbatazo final.
El Milan sufre ante un sorprendente y aguerrido Estrella Roja
Milan consiguió su boleto a Octavos de Final de la Europa League pero le costó trabajo eliminar a los serbios que estuvieron cerca de la hazaña en el Giuzeppe Meazza.
Los visitantes se quedaron sin un hombre por la expulsión de Marko Gobeljić, quien se fue por doble amarilla al minuto 70 en un partido de vuelta que terminó con reclamos de parte de los serbios debido a que el silbante no permitió que cobraran un tiro de esquina al pitar el final del encuentro, en lo que prácticamente era la úlitima jugada.
El encuentro fue cerrado, los visitantes llegaron al Giuseppe Meazza con el cuchillo entre los dientes y dispuestos a hacer la hazaña luego de haber empatado a dos goles en su estadio. Las oportunidaes en ambas porterías estuvieron presentes, incluso el arquero Milan Borjan fue figura sacando pelotas peligrosas sobre su portería y la única manera de vencerlo fue por medio de un penalti cobrado de manera efectiva por Franck Kessié al minuto 9, lo que daba la impresión de que sería un juego de trámite para los italianos que suman cuatro partidos sin ganar.
Pero el Estrella Roja no se quedó de brazos cruzados y al minuto 24 El Fardou Nabouhane recibió un pase filtrado de Mirko Ivani´c que lo dejó dentro del área para que con un disparo cruzado venciera a Donnarumma y diera esperanza a su equipo que en varios pasajes del partido fue peligroso, haciendo trabajar de más a la zaga de los locales.
En la segunda mitad ambos equipos crearon oportunidades claras, pero fueron los serbios quienes tuvieron la más peligrosa ante un disparo de Nabouhane que Donnarumma sacó con una tremenda atajada en la recta final del encuentro. El guardameta se lanzó y con la mano izquierda desvió el esférico que quedó suelto en el área pero la defensa logró despejar para evitar mayor contemplación.