Luis Enrique Martínez, seleccionador español, no ocultó que para él el mejor jugador del mundo es el argentino Lio Messi, pero s umó su nombre al del portugués Cristiano Ronaldo, al que se enfrenta este miércoles en el amistoso de España ante Portugal, como "ejemplo" para el resto por su "motivación" y "ambición".
Luis Enrique recalca que Messi el mejor jugador del mundo por encima de Cristiano
Luis Enrique, técnico de España, también elogió a Cristiano Ronaldo, pero tiene claro quien es el mejor.
"No creo que sea bonito volver a comentar ahora quién es el mejor jugador del mundo para mí, está en las hemerotecas", dijo recordando las veces que se ha decantado por Messi, "pero es cierto que es digno de elogiar que Cristiano y Messi van cumpliendo años y mantienen un nivel altísimo por la motivación y la capacidad que tienen para seguir cumpliendo retos. Son un ejemplo de dos jugadores top", añadió.
El duelo ante Portugal no dependerá para Luis Enrique de la aparición en el campo de Cristiano Ronaldo. "No sé si realmente habrá oportunidad de enfrentarnos a Cristiano y si jugará".
"Independientemente de que juegue, nuestro objetivo no cambia. Vamos a intentar ser protagonistas en el partido y ser mejores que Portugal, una selección potente que está por delante de nosotros en el ránking Fifa, que ha conquistado cosas importantes y tiene una mezcla de jugadores jóvenes y veteranos importantes", manifestó.
El seleccionador español lamentó que el número de cambios del que va a disponer en Lisboa sea de seis y que no pueda hacer jugar a más internacionales y repartir minutos en una semana en la que encara tres partidos.
"El problema es que solo tengo seis cambios en el amistoso. Todos los partidos son importantes y el de Portugal me da pie a poder probar más cosas, los oficiales menos, aunque siempre hay cambios", dijo, ante posibles variantes respecto a sus últimos equipos como puede ser la entrada de Adama Traoré.
"Ante Portugal priorizaré a los jugadores que necesitan participar más. Aunque en la selección no es habitual jugar tres partidos en una semana, los jugadores están acostumbrados a un calendario apretado. Los objetivos no cambian e intentaremos ganar cada partido, generar más fútbol y defender menos tiempo que el rival", añadió.