Juegos Olímpicos Paris 2024

    Alejandra Orozco se permitió disfrutar su último clavado olímpico en Paris 2024

    La atleta mexicana afirmó que vivió como nunca antes su participación en Paris 2024.


    Por:
    Antonio Quiroga.


    Video Ale Orozco y su último clavado olímpico: "Sentía la piel chinita"
    La atleta mexicana afirmó que disfrutó como nunca antes su participación en Paris 2024.
    3:07 mins

    Alejandra Orozco, multimedallista mexicana en Juegos Olímpicos, vivió como nunca antes su último clavado en la Plataforma de 10m sincronizados en Paris 2024.

    En entrevista exclusiva con Valeria Marín de TUDN, la clavadista, quien pone punto final a su carrera olímpica, detalló cómo fue lo que vivió en el Centro Acuático hace unos días.

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    "En mi último clavado quería pensar en hacerlo bien y creo que por eso no salió bien, estaba pensando en todo, estaba viviendo, sentía la piel chinita de ver a toda la grada, de ver que era local. Cada escalón que subía sabía que era el último, me permití ver, fue todo, voltear a ver a todos, pantalla, compañera, buscar a mi familia en la grada, jueces, entrenadores de otros países".

    Orozco, abanderada de México en Paris 2024, aseguró que ahí mismo, justo antes de lanzarse desde la plataforma, tembló por primera vez en su carrera, algo que nunca había vivido.

    "Me paré temblando, no había temblado nunca en ninguna competencia como en ese último clavado, sentí paz de que lo di todo, que busqué pararme con la mejor actitud y la mejor disposición de hacerlo bien".

    ALEJANDRA OROZCO NO OLVIDA QUIEN LA TOMÓ DEL BRAZO

    Alejandra Orozco no quiso cerrar la entrevista sin antes agradecer a todas las personas que la acompañaron en su carrera en los clavados, al afirmar que las derrotas la hicieron más fuerte.

    "Solo pensaba en agradecer a cada persona que estuvo conmigo en todo el camino, que me acompañaron y sobre todo en este último pedazo que me levantaron de muchas cuando quise tirar la toalla, me quedo con eso, disfruté como nunca la había hecho, me regalé los clavados que quizá nunca me los había regalado. Me quedo también con las derrotas, porque siento que sí no hubiera tenido esas derrotas, no me hubiera levantado más fuerte".

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