Uno de los factores para que Pachuca se llevará el trofeo fue la mentalidad que tuvo el equipo después de la expulsión de Aquivaldo Mosquera, pese a jugar con 10 hombres la segunda mitad los Tuzos nunca bajaron los brazos y generaron peligro en el arco de Rayados hasta conseguir el gol ansiado.
Asimismo, la clave para que Pachuca consiguieran el título estuvo en la portería. A lo largo de toda la liguilla Óscar ‘Conejo’ Pérez, brilló por sus grandes actuaciones y ahora en la final no fue la excepción ya que por lo menos sacó en este último juego un par de balones que evitaron la caída de su marco.
El ‘Conejo’ trasmitió toda su experiencia a sus compañeros y gracias a eso sacaron el partido adelante para alzar su sexto título del fútbol mexicano.
Víctor Guzmán también fue una de las figuras del partido solo por el simple hecho de marcar el gol de los Tuzos, el mediocampista de Pachuca vino de la banca para darle el empate a su equipo en la agonía del encuentro. Guzmán hizo un último esfuerzo que será recordado en la historia de Pachuca.
Otro momento clave en la final y que pudo haber cambiado el rumbo del partido, fue la expulsión de Mosquera. Si el defensor no comete esa falta en los linderos del área sobre Dorlan Pabón el colombiano hubiera quedado solo frente al arco con muchas opciones de anotar el 2-0.
Si Pabón hubiera culminado esa acción habría sido mortal para Pachuca.
Otro punto que marcó el juego fue el penal fallado por parte de E dwin Cardona en la primera parte, el delantero tuvo la oportunidad de anotar el primero de Monterrey desde los once pasos, pero su tiro se fue a las gradas.
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Ese penal fallado pegó en el ánimo del jugador que se notó en el campo, y ese error pudo haber cambiado el rumbo del encuentro para el bien de Monterrey. Y dejó demostrado que en el equipo Rayado falta alguien que sea especialista en tirar penales, ya que en esta liguilla erraron cuatro de tres penales marcados a favor.
