Por Ernesto Reitich
Conoce al neurólogo judío que escapó de los nazis para inspirar los Juegos Paralímpicos
Ludwig Guttmann cambió el tratamiento de las discapacidades usando el deporte como herramienta, inspirando la creación de las Olimpíadas Paralímpicas.
Eva Loeffler no recuerda a su padre como un deportista dedicado. “Él no era atlético, era bajito, rellenito. No podía nadar, incluso no sabía manejar bicicleta. Lo recuerdo chocando su bicicleta contra la pared y diciendo ‘no más’, recuerda Eva entre risas.
Pero su padre, el Profesor Ludwig Guttman, probablemente es uno de los individuos que ha influenciado más en la historia del deporte, “Poppa”, como lo llamaban la mayoría de sus pacientes, es considerado el padre de los Juegos Paralímpicos.
El día que el Rey Jorge VI inauguró los Juegos Olímpicos de 1948 en Londres, el Dr. Ludwig Guttman presidió la competición de tiro con arco en silla de ruedas, en los terrenos del hospital de Stoke Mandeville. Los competidores, eran dieciséis ex soldados, con lesiones graves en la columna. Los juegos, fueron el primer paso en el sueño de los Juegos Paralímpicos de Ludwig Guttman.
Obligado por la locura nazi. El deporte fue la clave.
Guttman había sido un neurólogo de renombre internacional en Alemania en los años treinta, pero su carrera había sufrido bajo severas leyes antisemitas, que le prohibieron el tratamiento de los no Judíos. Huyó de Alemania en 1939 y llegó con su esposa y dos niños pequeños a Oxford, Inglaterra, donde consiguió trabajo como investigador.
En 1944, finalmente le llegó la oportunidad de trabajar como médico en Stoke Mandeville. En pocos años, habría transformado el tratamiento de parapléjicos en el Reino Unido. ¿Cómo lo hizo? El deporte fue la clave.
“Poppa” odiaba lo que encontró en la Unidad Espinal. El cuidado de los pacientes era meramente paliativo. La mayoría de los pronósticos eran terminales. Adolescentes con parálisis eran enviados a sus camas y encarcelados en yeso. El 80% de los pacientes morían en tres años, a causa de las úlceras por presión, infecciones del tracto urinario y otras complicaciones. La moral entre el personal era infinitamente baja.
Pero Guttman transformaría el lugar. Acabó con los cuidados insensatos, desafió al personal negativo e inspiró a sus pacientes para que lucharan. Fundamentalmente introdujo la idea de la fisioterapia como tratamiento médico. Su herramienta principal fue el deporte como una manera de construir fortaleza y como un antídoto contra la depresión. Contrató a un preparador físico del ejército para literalmente, lanzar bolas a los pacientes, los puso a entrenar, a levantar pesas, a moverse y funcionó.
En pocos meses, la Unidad Espinal se convirtió en un espacio lleno de milagros, esperanza y determinación. Un veterano de la Primera Guerra Mundial, que había estado tumbado sobre su espalda durante 26 años, llegó a la Unidad para probar una de sus sillas de ruedas nuevas. Seis meses más tarde, estaba caminando con la ayuda de sólo un bastón.
Guttman fue un personaje notable, divertido, compasivo y carismático. 'Poppa', era incansable, omnipresente, inventivo y desafiante. Las historias de su relación con los pacientes son mágicas. Sus numerosos conflictos con los colegas y la administración dan testimonio de su compromiso y energía. Su trabajo médico fue notable en sí mismo pero también vio cómo el sueño olímpico podría servir a otro propósito, luchar contra los prejuicios y ampliar el conocimiento.
Por más de veinte años, Guttman trabajó para ampliar los Juegos de Stoke Mandeville, abriendo el evento al creciente número de atletas con discapacidad y con la participación de más naciones. En tan sólo doce años, en 1960, los primeros Juegos Paralímpicos oficiales tomaron parte en Roma, junto a los Juegos Olímpicos. Fue la culminación de la obra de una vida, que muchos agradecerán por siempre.
Río 2016
Los Juegos Paralímpicos 2016 que arrancaron este miércoles en Río de Janeiro, no tienen la publicidad de los Juegos Olímpicos, ni de un Mundial de fútbol, pero son por su dimensión y el número de atletas, el segundo evento deportivo más grande del mundo.
La competencia se alargará durante doce días, hasta el próximo 18 de septiembre, cuando se pondrá oficialmente el punto final a la fiesta olímpica de Río 2016. Se celebrarán por primera vez en Sudámerica y en esta ocasión participaran un total de 4.350 atletas de 176 países. En este evento deportivo se mezclan el deporte de alta competición con muchas historias que intentan enviar un potente mensaje de superación.
Habrá 528 pruebas en 23 disciplinas. Se competirá en: tiro con arco, atletismo, bochas, piragüismo, ciclismo en pista, ciclismo en ruta, equitación, fútbol 5, fútbol 7, fútbol para invidentes, judo, halterofilia, remo, vela, tiro, voleibol en silla de ruedas, natación, tenis de mesa, triatlón, baloncesto en silla de ruedas, esgrima en silla de ruedas, rugbi en silla de ruedas y tenis en silla de ruedas.