Algunos como Michael Phelps o Katie Ledecky se destacan por su rapidez, por su presencia, por sus asombrosas brazadas, por las marcas y registros que van rompiendo cada vez que entran a una alberca en Río 2016. Pero ese no es el caso de Robel Kiros Habte, un nadador etíope de 24 años de edad que se ha vuelto noticia en los Juegos Olímpicos pero por su lentitud.
El etíope Robel Kiros Habte, el nadador más lento de los Olímpicos de Río 2016
En las eliminatorias masculinas de los 100 metros libres llegó 18 segundos después del ganador de su serie.
El africano, que tenia una dura eliminatoria en los 100 metros libres, tuvo como rivales, entre otros, a nadadores como los australianos Kyle Chalmers (47:90 en esa ronda) y Cameron McEvoy (48:12), ambos medalla de bronce en relevos 4x100 libre.
Robel, además de quedar último con un tiempo de 1:04.95, llegó siete segundos más tarde que el nepalí Sirish Gurung, penúltimo en su eliminatoria, y por si fuera poco, marcó el peor tiempo de los 59 nadadores que compitieron en esta modalidad.
El caso del etíope, aunque no fue tan dramático, le hizo recordar al público a Eric Moussambani, el nadador de guinea ecuatorial que en los Juegos de Sídney 2000 nadó la misma distancia en 1:52.72.
Pero la noticia no paró ahí. En un país reconocido por tener a varios de los mejores atletas del mundo, este nadador fue el abanderado de Etiopía en Río y varios medios dicen que eso se dio porque es hijo del presidente de la Federación Etíope de Natación, Kiros Habte Kinfe.
¿Cuál fue la explicación de Robel?: "Yo quería hacer algo diferente por mi país. Por eso elegí la natación. En Etiopía todo el mundo corre desde que se levanta. Pero no se nada. Yo no quería correr, quería ser un nadador. Por eso no hay problema en qué posición haya acabado", afirmó a Reuters tras su prueba.
Lo único que sí es claro es que su físico dista mucho del que tiene los nadadores de élite, pues lejos de tener un cuerpo marcado, el del etíope se ve mucho más similar a un espectador aficionado a este deporte.