El reto de Marcos Madrid

CIUDAD DE MÉXICO, México, Abr. 13, 2016.- El tenimesista Marcos Madrid aseguró que con su clasificación olímpica a Río 2016 comienza una nueva etapa en su vida y en su carrera deportiva.

Con su participación en los primeros Juegos Olímpicos de su vida, Madrid Mantilla cumplió su más grande sueño desde que comenzó a jugar tenis de mesa, a los siete años de edad.

"Estoy muy contento de cumplir este sueño de mi vida; igual muy satisfecho porque es un premio que mi familia se merecía también por tantos esfuerzos y sacrificios que han hecho y sobre todo siempre apoyándome en todo momento".

"Empieza una nueva etapa en mi carrera y en mi vida también, todavía estoy muy soñado con saber que voy a Río, quiero realmente disfrutar los juegos y aprovechar que ahora habrá mucho más apoyo y puedo prepararme lo mejor posible para los Olímpicos", indicó el joven de 29 años de edad.

El poblano logró la cuota olímpica en el Torneo de Clasificación en Santiago, Chile, el 2 de abril. En la final se repuso de un marcador adverso de 1-3 para ganar 4-3, gracias a la fortaleza mental con la que jugó, para lograr la primera plaza olímpica de México en el certamen.

"Me gustaría mantener ese tipo de mentalidad, algo muy bueno es que sé que lo puedo hacer, la cosa es mantenerse lo mejor posible, aceptar que no siempre puedes estar al cien por ciento y bueno lo mejor es jugar con lo que tienes en ese momento y tus sensaciones. Hay que ser siempre positivos de una forma y eso lo seguiré trabajando porque es algo clave en mi deporte", explicó Madrid.

Dentro de los planes de trabajo del experimentado jugador está continuar su actividad en la liga y disputar varios abiertos y torneos en Europa y Asia.

"Tengo la liga el 26 de este mes y sigo todo mayo con ella. A principios de junio tengo la Copa Latina, que es clasificatoria para la Copa del Mundo e inmediatamente tengo un torneo en Zagreb, Croacia. A mitad de junio el Abierto de Japón y Corea y después regresaré a Francia y luego a México ya para ir a Río", detalló.