Luego de 11 años de probar suerte cada una por su lado, la Organización Nacional Estudiantil de Futbol Americano (Onefa) y la Conferencia Nacional Deportiva Estudiantil de Instituciones Privadas (Condeip) se sentaron a la mesa de diálogo con la encomienda de fraguar un acuerdo de unificación.
El significado la de unificación del futbol americano colegial en México
Tras 11 años de ruptura, el futbol estudiantil une las piezas y arma un interesante rompecabezas.
A lo largo de poco más de una década hubo escarceos a la hora de buscar integrarse, luego de que los equipos del Tecnológico de Monterrey en sus diferentes campus junto con la Universidad de Las Américas decidieran encabezar una liga alterna, pero no hubo condiciones para negociar, para llegar a acuerdos.
Pero, como dice la canción de Joaquín Sabina "el agua apaga al fuego y al ardor los años", y el tema central por el que se generó la ruptura, la falta de regulación en el reclutamiento de jugadores forjados en escuelas públicas para ser becados en las privadas, se pudo dirimir.
A través de un comunicado la Onefa anunció que la Condeip solicitó un reingreso con todos sus equipos para la temporada 2020 de la Liga Mayor, una petición que fue aceptada.
"Todos los programas de futbol americano que conforman a la Onefa en la categoría Mayor escucharon la solicitud de regresar de los equipos provenientes de la Conadeip para la presente campaña 2020, por lo que por consenso, se acordó el regreso de los equipos", informó el comunicado de la Onefa.
Y añadió: "Se perfila una temporada con ocho partidos sin importar la cantidad de equipos por conferencia, para así hacer frente con gran nivel a cada compromiso pactado semana a semana. Por lo que en beneficio del futbol americano se espera que la Onefa cuente con al menos 27 equipos para la próxima campaña y 24 partidos en total de Liga Mayor".
En estos 11 años los equipos de mayor tradición en el deporte estudiantil por excelencia como Pumas de Ciudad Universitaria, Tigres de la UANL y los Burros Blancos del Instituto Politécnico Nacional pudieron quebrantar el monopolio de títulos nacionales que por largo rato habían acaparado los Borregos Salvajes del Tecnológico de Monterrey, campus Monterrey.
Con grandes entradas en estadios que a últimas fechas había acaparado el balompié para sí, como el Estadio Olímpico Universitario, el Estadio Azul o el Estadio Universitario de la UANL, con títulos nacionales en disputa, los equipos de la Onefa no solo ganaron la obvia notoriedad por los logros, también ayudaron a darle más fuerza mediática y deportiva al futbol colegial en México.
Pese al buen nivel de futbol americano desplegado por los Borregos campus Monterrey, Toluca y los Aztecas UDLAP, las asistencias en sus estadios a veces desentonaban con lo que sus equipos mostraban en el terreno de juego, dando una sensación de ambiente desangelado. Claro, no era lo mismo en Playoffs y Finales, pero la esencia de jugar ante las instituciones de gran abolengo, ya se echaba en falta.
El interés que revestían los partidos interconferencias, como parte de la pretemporada de ambas ligas, entre equipos de instituciones como la UNAM, IPN, UVM y UANL ante los Tecs y la UDLAP eran el inequívoco síntoma de que el público fiel a este deporte quería verlos en el emparrillado en juegos que contaran.
El presupuesto que las instituciones públicas invierten en las categorías juveniles e infantiles tiene como propósito inyectar sus filas con esa sangre nueva que va surgiendo de sus 'hornos' para reforzar y mantener competitivos a sus equipos toda vez que la elegibilidad de los veteranos llegaba a su fin.
Sin embargo, llegaban los representantes de las escuelas privadas de gran prestigio con una beca completa enla mano, a cambio de llevarse a ese jugador que se destacaba para