Su forma de vida le cambió de un día para otro. Alex Danson, era la capitana del equipo de Gran Bretaña de hockey sobre pasto, había sido medalla de bronce en Londres 2012 y oro en Río de Janeiro 2016, estaba con el organigrama de trabajo para Tokyo 2020, pero algo pasó… De repente perdió la capacidad de leer, de entablar una conversación, de tolerar la luz. Había perdido su identidad.
La jugadora de hockey que pasó de ser medalla de oro a no poder leer por conmoción cerebral
Un fuerte golpe en la cabeza con un asiento de cemento le cambió la vida a Alex Danson, medallista en 2012 y 2016 en hockey sobre pasto.
“Hace seis meses, mientras estaba de vacaciones, me golpeé la cabeza. Inmediatamente supe que algo no iba bien. Seis semanas más tarde, me llevaron al hospital con una sospecha de hemorragia porque tenía convulsiones. Ha sido la experiencia más dura que he vivido. Cuando salí del hospital, caminar al baño era casi imposible y era lo más que podía hacer”, indicó la atleta, quien publicó su sentir en su cuenta de Twitter.
“Estuve en la cama las 24 horas del día durante semanas y semanas. No podía tolerar la luz, el sonido o que la gente me hablara. Mi memoria, concentración y capacidad para leer o mirar pantallas era cero. Ahora puedo caminar durante casi 30 minutos, mantener una conversación y recordar cómo hervir un huevo. Sigo teniendo dolores de cabeza y me siento mareada la mayoría de los días”, recalcó.
It’s been a long 6 months......I’m thankful to say I’m on the road to recovery #mildtraumaticbraininjury pic.twitter.com/mJQWlNnDX8
— Alex Danson MBE (@AlexDanson15) March 4, 2019
Y es que Alex se golpeó en la parte posterior de la cabeza con un asiento de cemento, ese pequeño instante le transformó la vida, hoy día sonríe, agradece a su familia y se congratula de vivir pese a que su forma de vida ya no será la misma.
“Una de las partes más difíciles de todo esto, aparte del trauma físico, ha sido la pérdida de mi identidad. Pasar de dirigir a mi país, aspirar a clasificarse para los Juegos Olímpicos de Tokio, a intentar vivir un día”, sentenció.