Los presidentes de Alemania e Israel inauguraron este miércoles un monumento conmemorativo de los 11 atletas y entrenadores israelíes y un agente de policía alemán occidental que fueron asesinados hace 45 años, durante un ataque de un grupo de milicianos palestinos a los Juegos Olímpicos de Múnich.
Levantan monumento a víctimas del atentado de los Juegos Olímpicos Munich 1972
Los presidentes de Alemania e Israel honraron a los 11 atletas y entrenadores que fallecieron tras ser secuestrados por un grupo palestino.
Durante la inauguración en el Parque Olímpico de la ciudad, los presidentes Frank-Walter Steinmeier y Reuven Rivlin estuvieron acompañados por familiares de las víctimas.
"Hemos venido hoy día a cerrar un círculo, un círculo que nunca realmente podrá ser cerrado", dijo Rivlin al grupo reunido.
Rivlin dijo que los Olímpicos de Múnich de 1972, llamados "los juegos alegres" por ser los primeros que organizaba el país desde 1936, cuando los nazis la organizaron en Berlín, "se tornó en una Olimpiada de sangre".
El 5 de septiembre de 1972, integrantes del grupo palestino Septiembre Negro ingresaron a una villa olímpica trepando por un cerco no vigilado, irrumpieron en la instalación donde estaba el equipo israelí y tomaron a los atletas como rehenes.
Cinco atletas, seis entrenadores y un agente de policía alemán occidental fueron asesinados en la villa o durante el fallido operativo de rescate.
Los atacantes palestinos exigieron la liberación de prisioneros detenidos por Israel y dos extremistas de izquierda encarcelados en Alemania Occidental.
El monumento, que tiene un techo con grama, está en una colina dentro del parque Olímpico y muestra arte multimedia sobre las vidas de los atletas y el agente de policía. Está abierto al público todos los días.