HOUSTON, Estados Unidos, nov. 4, 2016.- El último y decisivo partido de la Serie Mundial, el séptimo, que dejó la victoria de Chicago Cubs por 8-7, en 10 entradas, ante los Cleveland Indians, tuvo una audiencia de televisión que alcanzó los 40 millones de televidentes en Estados Unidos, el más visto desde 1991.
Impone marca el séptimo juego
El juego definitivo de la Serie Mundial entre Cubs e Indians registra una marca en audiencia en Estados Unidos
De acuerdo a la compañía especializada Nielsen, la Serie Mundial completa promedió 23,4 millones de televidentes en la que fue la más popular desde la disputada en el 2004. Entonces, también se rompió otra maldición, la del "Bambino", por parte de Boston Red Sox que derrotó a St. Louis Cardinales y puso fin a otro largo periodo de 87 años sin un título.
El triunfo, que se decidió la madrugada del pasado jueves, permitió a Cubs acabar con llamada "Maldición de la Cabra" y fue el primer título del "Clásico de Otoño" que consiguió el equipo de Chicago desde 1908.
La gran emoción y suspense que generó el marcador final hizo que el interés por ver el desenlace del partido se incrementase de lo que fue la tercera victoria consecutiva de los Cubs.
El nivel de audiencia del partido alcanzó su punto máximo justo debajo de los 50 millones de televidentes entre las 11:30 y las 11:45 de la noche, una audiencia extraordinaria dado que era muy tarde para el público de la Costa Este y en día laboral y de colegios.
Otro Séptimo Partido histórico lo protagonizaron los Minnesota Twins ante Atlanta Braves en 1991, el que alcanzó los 50,3 millones de televidentes, siempre de acuerdo a Nielsen. Ya es tradición que la audiencia se va interesando cada vez másen la Serie Mundial mientras más se alarga.
Pero los ratings para el Séptimo Juego de este año mostraron un interés sin precedentes: ningún otro partido individual había superado los 23,6 millones de televidentes.
El anterior más reciente en una Serie Mundial, que fue entre los San Francisco Giants y Kansas City Royals, en 2014, llegó a 25,4 millones de personas.
La Serie Mundial anterior, entre los Kansas City Royals y New York Mets, que se definió en cinco partidos, dejó un promedio de 14,7 millones de televidentes por encuentro.